Política

Libia

Margallo dice que los daños en Embajada de España en Trípoli son «muy limitados»

El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha explicado hoy que el artefacto explosivo que estalló junto a la embajada de España en Trípoli sin causar heridos era una "bomba casera"y que los daños han sido "muy limitados". Un artefacto explosivo de mediana potencia estalló esta madrugada junto a la embajada de España en Trípoli sin causar heridos aunque sí daños materiales en el exterior del edificio, situado en el distrito central de Manshiya, informaron a Efe fuentes de Seguridad en la capital norteafricana.

En declaraciones a los periodistas en Madrid tras participar en la inauguración del VIII Foro España-China, el jefe de la diplomacia española ha confirmado que se trataba de una "bomba casera".

García-Margallo ha recordado que España procedió a la evacuación del personal diplomático de la embajada a finales del pasado mes de julio cuando los acontecimientos en el país así lo aconsejaron.

"Se pudo hacer en tres etapas y con enorme rapidez", ha subrayado el ministro de Exteriores.

Según las fuentes de Seguridad en Trípoli, la bomba estalló poco antes de la 01.00 local (23.00 GMT) cerca de los muros de la legación diplomática, que está vacía -con solo guardias de seguridad locales- desde que fuera evacuada meses atrás.

El pasado 12 de abril, al menos dos guardias de seguridad murieron y una tercera persona resultó herida en un atentado similar contra la embajada de Corea del Sur en la capital libia.

El mismo día, un segundo artefacto estalló frente a la legación de Marruecos sin causar víctimas, en un ataque cuya autoría asumió la rama libia del grupo autoproclamado Estado Islámico (EI), que lucha en Siria e Irak.

La agresión condujo a Seúl a retirar a su personal de la embajada, decisión que ya habían adoptado con antelación otros países -incluido España el pasado 31 de julio- ante el creciente deterioro de las condiciones de seguridad en el país.

Libia es un estado fallido, víctima de la guerra civil y el caos, desde que en 2011 la comunidad internacional apoyara el alzamiento rebelde contra la dictadura de Muamar al Gadafi.

Desde las últimas elecciones, el poder esta dividido entre los gobiernos de Trípoli y de Tobruk, a quienes apoyan distintos grupos islamistas, señores de la guerra, líderes tribales y contrabandistas de petróleo, armas, personas y drogas.

En medio, se fortalecen grupos yihadistas afines al EI en Siria e Irak y a la organización de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), la asociación terrorista más fuerte aún del norte de África.