Marlaska acusa al juez del caso Begoña Gómez de lawfare: "No hay objeto claro de investigación"

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha cuestionado este miércoles el desarrollo de la investigación judicial abierta contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Durante una visita a las obras de la futura sede de la Jefatura del Servicio de Información de la Guardia Civil en Pozuelo de Alarcón, Marlaska ha asegurado que “no hay un objeto claro y preciso” en la instrucción que dirige el juez Juan Carlos Peinado y ha calificado de “curioso” que se haya citado como testigo al ministro de Justicia, Félix Bolaños, sin que lo solicitara ninguna de las partes.

El titular de Interior ha subrayado que la declaración de Bolaños, que ha acudido este mismo miércoles al Palacio de la Moncloa para prestar testimonio ante el juez, se ha producido “en cumplimiento de un deber y con toda la voluntad”. Sin embargo, ha remarcado que le resulta “curioso” que la comparecencia se haya producido “sin que lo hayan pedido ni la Fiscalía, ni la defensa ni las acusaciones”.

El juez Peinado investiga la contratación de Cristina Álvarez como asesora de Gómez en calidad de personal eventual de Moncloa, un nombramiento que ha servido de base para llamar a declarar a Bolaños como testigo en la causa.

"El paradigma de lo que no es una instrucción"

Con más de tres décadas de experiencia en la judicatura, muchos de ellos como juez de instrucción, Marlaska ha cargado contra el desarrollo del procedimiento, asegurando que “esta investigación es el paradigma de lo que no es una instrucción judicial”, al tiempo que ha reiterado su respeto por la labor del Poder Judicial.

“Hay muchas piezas abiertas sin una concreción del objeto de investigación. Creo que nadie sabe a ciencia cierta qué se está investigando”, ha afirmado. En ese sentido, ha sostenido que tras un año de diligencias “no se ha observado ninguna irregularidad, porque no la hay”.

Marlaska también ha recordado que la Audiencia Provincial de Madrid ya limitó el alcance de la investigación por “ausencia de indicios”, desautorizando varios elementos clave de la instrucción. “Lo más grave es que se hayan anulado diligencias tan importantes como entradas y registros o la interceptación de dispositivos electrónicos por vulneración de derechos fundamentales”, ha señalado, en referencia al caso del empresario Juan Carlos Barrabés, también investigado en la causa.

Asimismo, ha acusado al juez Peinado de “desatender” las indicaciones de la Audiencia Provincial, algo que, a su juicio, “es muy grave para un juez de instrucción”.

Para el ministro, la causa está “abocada directamente al fracaso”, y ha confiado en que, llegado ese momento, “quienes han utilizado esta investigación con fines políticos, como el Partido Popular, tengan la dignidad de pedir disculpas”