Ruz deberá expurgar el «pendrive» de Bárcenas de archivos «íntimos»

Nueve carpetas de colores y un «pendrive». Ésa es la información facilitada por Luis Bárcenas al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz el pasado lunes durante su última comparecencia judicial. Pero en el soporte digital entregado al magistrado no sólo hay anotaciones sobre la supuesta contabilidad «B» del PP, sino también –según reconoció el propio ex tesorero– archivos de carácter «íntimo o personal» que el instructor deberá ahora expurgar antes de incorporar toda esa información a la causa. De hecho, en un auto notificado ayer, Ruz acordó la formación de una pieza separada «que contendrá todos los documentos ya aportados por el imputado», previa digitalización de los mismos. Hoy mismo, el juez ha citado a las partes para efectuar una copia de los archivos para analizarlos después y dejar al margen esos datos «que no tengan interés alguno» para la investigación. Se trata, recalca Ruz en la resolución, de «impedir la vulneración de otros derechos fundamentales en juego», tanto de Bárcenas como de terceras personas.

El magistrado también ha decidido, en una providencia firmada ayer, que se transcriba la última declaración de Bárcenas. Hasta ahora, las comparecencias se grababan en vídeo, dándose traslado de esas imágenes o únicamente del audio a las partes (un acuerdo de la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional instó hace meses a los magistrados a no ordenar la transcripción de las declaraciones para ahorrar costes). Pero el juez quiere evitar la difusión pública de las imágenes o de las grabaciones de voz, por lo que ha decidido que, en esta ocasión, sólo se dará traslado a defensas y acusaciones de una transcripción de la declaración.

Además, el instructor ha encargado un informe a la Policía Judicial para tratar de identificar al abogado que el pasado lunes difundió a través de Twitter parte de la declaración de Bárcenas.

En cuanto a las carpetas entregadas por el ex senador al juez (cuatro azules, dos amarillas, una lila, otra sepia y la última, verde) contienen anotaciones contables, listados de ordenador de movimientos de dinero, relaciones de ingresos y un supuesto recibí a nombre de José Ángel Cañas, ex gerente del PP de Toledo al que, según Bárcenas, entregó 200.000 euros a cambio de una contrata de limpieza. Además, esos clasificadores también incluyen resguardos de ingresos en efectivo en Banesto y hojas manuscritas de entrada y salida; fotocopias de resguardos de recibís de Caja Cantabria, Volkswagen Finance y Unicaja; una anotación manuscrita «L de R» (que contiene dos recibos de notaría, «recibís y algunas fotocopias de cheques y documentación de tipo bancario») y dos tarjetas de visita con anotaciones manuscritas en su reverso, diversas facturas y una relación de movimientos. Por último, una carpeta con la anotación a mano «Bilbao» incorpora un hoja de cuaderno de contabilidad, listado de movimientos a ordenador, copia de un contrato y «fotocopias de impresos bancarios del Banco Popular e impresos bancarios manuscritos del Banco de Vitoria, Argentaria, BBVA y Banesto».