"Caso Koldo"
El Supremo arropa al juez y pondera su "paciencia franciscana" frente a las acusaciones de Ábalos y Koldo
La Sala Penal respalda la investigación de las adjudicaciones bajo sospecha en las anotaciones del exasesor del ministro que aportó Aldama
Nuevo respaldo del Tribunal Supremo (TS) al magistrado que investiga a José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García. La Sala Penal ha avalado su decisión del pasado abril de ordenar a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil investigar las adjudicaciones públicas que aportó el comisionista Víctor de Aldama con anotaciones atribuidas al ex asesor de Ábalos según concluyó una prueba pericial.
Tanto el exministro como quien fuera su asesor recurrieron esa decisión, pero ahora la instancia superior al instructor descarta que se trate de una indagación prospectiva y que la aportación de Aldama fuera insuficiente para abrir esa línea de investigación.
Según indica la resolución, de la que ha sido ponente el magistrado Antonio del Moral, "no puede hablarse seriamente de investigación prospectiva". "Avanzar en una investigación", precisa, no exige poderosos indicios de criminalidad", puesto que la investigación precisamente "se abre para eso, para buscar indicios que avalen o desmientan" los hechos con apariencia delictiva. "Si ya los hubiese no sería necesario prolongarla", apunta.
El apoyo a Leopoldo Puente llega hasta el punto de que los magistrados de la Sala dicen sentirse "identificados" con "las explicaciones que el instructor reproduce con paciencia franciscana" en el auto en el que adoptó la decisión discutida por Ábalos y Koldo. Y deja claro que "nunca" hay que "taparse los ojos ante esas revelaciones que cobran visos de veracidad".
No hay "causa general"
"Indagar la veracidad de la información sobre comportamientos presuntamente delictivos puestos de manifiesto por un coinvestigado y con visos de verosimilitud -aclara la Sala- no tiene nada que ver con lo que sería una repudiada causa general".
Se trata, afirma, de "diligencias acordadas para constatar si se corresponde con la realidad lo narrado ante un juez por otro investigado", en este caso Aldama.
Y recuerda que el aspecto controvertido sobre la autoría de esas anotaciones referidas a determinadas adjudicaciones públicas con sospecha de amaño "ha sido corroborado" por un informe pericial.
"Sería un absurdo pensar que una investigación solo debe abrirse cuando concurren indicios racionales de criminalidad. ¿Cómo se puede haber hecho acopio de esos indicios si para iniciar la investigación han de estar ya presentes?", se pregunta. "Y, si los hay desde el inicio, ¿para qué una investigación para buscarlos? Esto resulta tan patente que cuesta argumentar más", replica a Ábalos y Koldo García.
Además, señala -en consonancia con lo que ya argumentó la acusación popular- que "esa línea de investigación ya había comenzado a explorarse en el procedimiento".
Que declare Marlaska es "inútil"
Por otro lado, en relación a la batería de diligencia que propuso Ábalos y que fueron rechazadas por el instructor -entre ellas las declaraciones del ministro y del secretario de Estado de interior-, la Sala recuerda que el magistrado "tiene obligación de rechazar las diligencias propuestas que sean perjudiciales o inútiles".
"Las declaraciones de las dos personas con altas responsabilidades en el Ministerio del Interior que se reclaman -argumenta el Supremo- no guardan relación con los hechos que hasta el momento se achacan" al exministro de Transportes.
La Sala también tumba la pretensión de la defensa de Ábalos de que declaren varios agentes de la Guardia Civil. " Si lo que se busca únicamente es sembrar dudas sobre las investigaciones no es esta fase adecuada para ese tipo de estrategias defensivas", le recuerda.
El Supremo no duda en calificar de "inútiles y meramente dilatorias" las diligencias solicitadas para "concretar número de visitas al Ministerio de Aldama" -que según pone de manifiesto "eran frecuentes", algo que "es hecho no discutido"- o "los mensajes intercambiados con personas dependientes del citado Ministerio del Interior", cuya relevancia para la investigación no considera justificada.