Una agenda con más de 250 viajes oficiales

Don Felipe cumplirá este miércoles 45 años, los cuales ha dedicado a prepararse para ser Rey. El año en que terminó sus estudios de Derecho concedió una entrevista a «Tiempo» en la que contó que los viernes, cuando no tenía que estudiar, los dedicaba a conceder audiencias, acudir a actos oficiales y a preparar discursos. La respuesta, 20 años más tarde, podría ser la misma. Sólo que no en su tiempo libre; es su día a día.

En un momento en que la institución monárquica se asemeja a un trapecista en el hilo que mueve la opinión pública, los ojos están cada vez más puestos en la figura del heredero a la Corona. ¿Qué hace realmente el Príncipe de Asturias hoy en día?

En la Carta Magna no están marcadas las obligaciones y responsabilidades del heredero a la Corona. Recibe una asignación anual por parte de las Cortes Generales que este año supone 146.376 euros. Es decir, es el sueldo del que dispone para desarrollar su agenda institucional. La «temática» no ha variado respecto a aquella entrevista en su primer año de facultad, pero el número puede afirmarse que sí. En 2012, según datos de Zarzuela, el Príncipe protagonizó 253 actividades oficiales en los 365 días que tiene el año. Es el segundo miembro de la Familia Real con la agenda más completa, sólo por detrás de la Reina. La diferencia con el Monarca, que realizó 131 actividades –el mes de diciembre estuvo de baja debido a la operación en la cadera izquierda–, es notable.

Y este año, según sostienen desde Zarzuela, la cifra se mantendrá e incluso podría aumentar. De las 253 actividades, 157 se han celebrado en territorio nacional y 96 en el extranjero. Además, concedió 139 audiencias en las que recibió a 1.481 personas. En ellas se tratan diversos temas, principalmente de apoyo al mundo empresarial y económico, medio ambiente, educativos, culturales y militares, ya que ostenta las categorías de Teniente Coronel del Cuerpo General del Ejército de Tierra (Infantería), Capitán de Fragata del Cuerpo General de la Armada y Teniente Coronel del Cuerpo General del Ejército del Aire. También mantiene encuentros con los órganos constitucionales, las principales instituciones del Estado y las Comunidades Autónomas.

Un día en la vida de Don Felipe comienza muy temprano. Madrugador, si el horario se lo permite, hace una tabla de ejercicios a primera hora. Desayuna un café cargado, y se turna con la Princesa de Asturias para llevar a las Infantas al colegio y recogerlas. Todos los días analiza un dossier de prensa con las publicaciones sobre la Familia Real que su equipo le prepara y mantiene encuentros periódicos con los directores de los medios de comunicación, en el ámbito de las audiencias privadas que concede y que suelen ser 3 o 4 a la semana.

Las personas más cercanas aseguran que es «exquisito y encantador». Y de mesa de despacho. «Así como el Rey es más de comunicación oral, el Príncipe es de papeles». Minucioso, retoca los discursos del día siguiente hasta altas horas de la madrugada si la situación lo requiere. Discursos que en el año pasado alcanzaron la cifra de 84, lo que supone 50 más que el propio jefe de Estado.

Agenda exterior

La agenda de Don Felipe traspasa nuestras fronteras: desde 1996 acude a todas las tomas de posesión de los presidentes de países iberoamericanos, que en 2012 le llevaron a Nicaragua, Guatemala, República Dominicana y México. Este año, los destinos serán Ecuador y Paraguay, en abril, y Honduras y Chile, en noviembre. Por otro lado, el Príncipe de Asturias realiza cada año un viaje oficial a Iberoamérica y otro a la Unión Europea, Oriente Medio o Extremo Oriente. Además de apoyar nuestros lazos empresariales y comerciales, se centra en la promoción de la lengua española a través del Instituto Cervantes. El número de viajes oficiales puede variar, así, el año pasado el Príncipe de Asturias se desplazó a Portugal, Estados Unidos, Panamá y Ecuador. No todos son de carácter oficial. El heredero a la Corona visitó un total de 17 países en 2012, Honduras como viaje de trabajo y Yibuti para visitar las tropas españolas desplegadas en la operación Atalanta de la UE, entre otros.