Un verano rosado. Rosado volcánico

En un país en el que el rosado o el clarete ha sido un vino histórico de consumo habitual entre los paisanos de zonas vinícolas, no tiene mucho sentido que en mi ansiada búsqueda de estos vinos, uno encuentre más intentos de conseguir afrancesados intentos de copiar rosados provenzales que de mantener y pulir el patrimonio nacional. Tenemos obligación de ser auténticos, pues aunque siempre aprender es bueno, copiar cosas que no mejoran lo que teníamos tiene poco sentido.

En esta búsqueda incesante, uno se acerca ávido a una de las zonas de moda del panorama nacional. Los volcánicos vinos de Lanzarote están seduciendo a propios y extraños por su profundidad de matices, que les transmite el terruño tan singular en el que se enclavan sus hermosas viñas. tan volcánicas como raras.

Bodegas el Grifo suponen sin duda una de las grandes banderas de estos singulares vinos. Siempre defenderé que la viña, el trabajo en el campo y el dominio del cultivo son posiblemente más importantes que el trabajo en la bodega. Siempre que uno no meta la pata, el terruño se debe reflejar en los vinos de forma directa, de lo contrario entraríamos en la tediosa globalización donde todo sabe igual sin saber de dónde viene. Este rosado de lágrima de listán negro es un vino diferente, donde se refleja el carácter del oscuro terreno lleno de matices minerales y que, aunque de aspecto durísimo, a modo de páramo insondable, guarda en sus estratos inferiores un cúmulo de historias geológicas que se plasman de forma evidente en las botellas que salen de esta casa.

Todo esto, al servicio de un rosado que tiene frutas rojas y preciosas, y una acidez maravillosa para el paso de boca, de esos que conquistan al buen bebedor. Gustoso y con todo el arrastre de la memoria de ese terruño lunar. El preciso prensado con aromas del rico mosto. Un rosado con hecho diferencial. De la isla de Lanzarote.

Bodega:

El Grifo

Vino:

Rosado de Lágrima 2023

Lanzarote

Pvp:

20,45 euros

elgrifo.com