GH VIP 7: Adara, finalista tras ver cómo estalla su triángulo amoroso

Todos esperábamos con expectación ver el programa de ayer y del que únicamente conocíamos quien iba ser su protagonista: Adara Molinero. El esperado encuentro con su ex pareja, Hugo Sierra, y con el galán italiano que había despertado en ella nuevos sentimientos dentro de la casa, Gianmarco Onestini, llevaban rumoreándose tanto en Guadalix de la Sierra como en el exterior todos estos días, desde que el martes Estela recibió la visita de su marido y Kiko Jiménez.

Y estos encuentros no se hicieron de rogar. Nada más comenzar la gala, Molinero conoció la noticia sola en el “búnker”: ¿Sientes a Gianmarco cerca?", le preguntó Jordi Gónzalez. “Sí”, contestó. En ese mismo momento, una imagen en la pantalla descubrió al italiano en la casa y a continuación otra de Sierra en el confesionario. La concursante solo repetía su ya mítica frase: “Madre mía Jordi, madre mía”, y sin dar crédito a lo que estaba pasando aseguró que: “esto es muy fuerte para mí”. Ante la situación y para tranquilizarla, el Super le garantizó que la decisión estaba en sus manos y que solo pasaría lo que ella quisiera. Tras esto, la concursante decidió reencontrarse primero con Hugo, con el que se fundió en un abrazo y saltaron las chispas desde el minuto uno. “Hay cosas que me han dolido mucho, pero ya las hablaremos fuera”, le dijo primero y prosiguió, “creo que nos merecemos una conversación”. Para Molinero lo más importante era saber que había sentido él después de tres meses separados: “Te he extrañado muchísimo, he valorado muchas cosas y te sigo amando”, le confesó. Pareció que las palabras lograron convencer a la concursante ya que al despedirse se dieron un apasionado beso.

Desde la otra habitación el italiano vio todo el encuentro. Abatido y tirado en el suelo no comprendía nada de lo que acababa de suceder y, contra todo pronóstico, siguió con la idea de encontrarse con ella para tener una conversación que nadie, ni si quiera ellos, se habían imaginado. Una Adara confundida solo repetía que no tenía claros sus sentimientos frente a un Gianmarco que solo necesitaba respuestas. “Solo dime una cosa, ¿te espero o no?”, preguntó el italiano, “no lo sé, estoy súper liada, necesito pensar”, contestó ella. El italiano le aseguró que durante las tres semanas que llevaban separados la había estado esperando, extrañando y pensando, palabras que parece que no fueron suficientes para ella que tuvo una despedida mucho más fría que la ocurrida minutos antes con Sierra. Por su parte y a la salida, el italiano lo tenía claro: “Si me quisiera me habría pedido que la esperara”.

La noche terminó con la expulsión de Estela con un 65,9% de los votos que convirtieron a Adara en la cuarta finalista de la edición. Junto a sus tres compañeras conocieron la noticia de que ya se encontraban en la final con imágenes de su paso por el concurso que estuvieron acompañadas con frases de sus familiares que les felicitaban por haber llegado hasta el final del “reality”. Bajo un cartel que las nombraba “¡Finalistas!” emocionadas se fundieron en un abrazo.