Marta López: de víctima a villana

Aunque asegura que no se “siente cómoda en el papel de víctima” que se le ha asignado tras ser engañada por Alfonso Merlos, Marta López tuvo ayer un ataque de ira y lágrimas, cuando las tornas cambiaron y esta imagen empezó a desvirtuarse a medida que avanza su exposición pública y rentabiliza su intimidad.

De víctima a villana, de ser la engañada a ser “la otra”, la amante de un sinfín de hombres casados y famosos a los que nadie se atreve a poner nombre. Todo comenzaba en Sálvame, el programa que ha acogido con los brazos abiertos a la ex gran hermana tras retirarse de la escena pública los otros implicados en el “Merlos Place”: Alfonso Merlos y Alexia Rivas.

Y mientras el futuro televisivo de la nueva pareja se apaga, el de Marta López ha dado un giro de 180 grados tras el escándalo. De tertuliana ocasional de “Ya es Mediodía”, el programa dónde se fraguó su romance con Merlos, ha pasado a protagonizar los contenidos de Telecinco en todas las franjas. Aunque ayer negaba la información publicada por la revista Semana, que publicaba que había firmado un contrato con Telecinco que le aseguraba facturar 33.000 euros en los próximos tres meses, lo cierto es que ha comenzado a colaborar asiduamente en Sálvame y Sábado Deluxe, los programas insignia de La Fábrica de la Tele.

Dos jugadores de fútbol de primera y un empresario, famosos casados con los que se insinúa, sin dar nombre ni pruebas, que han estado con Marta López

Pero esta sobreexposición mediática y las consecuencias de su “polideluxe” del pasado sábado, dónde dio a conocer detalles muy íntimos de su vida, comienza a pasarle factura y a perder apoyos entre los que antes la jaleaban y defendían. Entre ellos, su mejor amigo, Kiko Hernández.

El colaborador de Sálvame, que esta tele trabajando desde que se decretara el estado de alarma, se encuentra entre la espada y pared. A un lado de la balanza esta su, hasta ahora, inquebrantable amistad con Marta y al otro, su compromiso con la productora que le ha dado de comer los últimos once años.

Fue él, precisamente, quién tras no negar el affaire de Marta con un famoso casado, abrió la caja de Pandora que ha dejado la imagen de su íntima amiga por los suelos. El enfrentamiento entre ambos, tras amagar Marta con demandar a quiénes continúen insinuando que “tiene obsesión con los hombres casados”, ha provocado la primera fricción entre Marta y Kiko, que han acabado a gritos.

Marta asegura que no puede más y que trata de “remar a favor de obra” pero que “no va a consentir que se digan mentiras” y que se le acuse de haber mantenido un sinfín de relaciones con hombre casados. Llorando ha reconocido que la situación la está sobrepasando y que “si hoy estoy aquí es porque necesito trabajar, pero tengo ganas de irme”.

La histórica bronca de Kiko y Marta...¿realidad o montaje?.

Tras la gran bronca que se ha vivido en Sálvame entre Kiko Hernández y Marta López, la colaboradora se ha roto y se ha puesto a llorar de forma desconsolada en el plató al tiempo que aseguraba: “¿Vosotros creéis que yo estoy disfrutando de esto?”. Marta insistía en que “estoy trabajando” y soy consciente que “esto es Sálvame”, pero hay unos límites que “no estoy dispuesta a tolerar”.

Kiko Hernández, al igual que otros compañeros de Sálvame, consideran que ha sido ella la que diciendo “yo tengo para 30 Deluxe si hablo de con quiénes he estado” la que ha provocado que se especule con sus amantes. "Estoy pasándolo mal. Esta tarde ya no te creo. No creo que quieras parar esto-comenzaba Kiko Hernandez su conexión con Sálvame. Kiko ha llegado a recomendarle a Marta que se quede en su casa, aunque admitía que es un consejo que “va contra el programa que lleva 11 años dándome de comer”.

Aunque muchos creen que esta histórica bronca entre los íntimos amigos podría ser un montaje que permita a Marta seguir teniendo protagonismo las próximas semanas y mantener los datos de audiencia de Sálvame, lo cierto es que Marta López ha dejado se ser la “víctima” para convertirse en la nueva “villana” de Telecinco.