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Los sábados de Lomana: “Madrid es mucho más que Covid”

Carmen Lomana acude a ver la ópera “Un Ballo in Maschera” con motivo de la inauguración de la temporada número 24 del Teatro Real, en Madrid a 18 de septiembre de 2020.REY;REINA;VESTIDO ROJO;OPERA;TEATRO REALJosé Oliva / Europa Press18/09/2020
Carmen Lomana acude a ver la ópera “Un Ballo in Maschera” con motivo de la inauguración de la temporada número 24 del Teatro Real, en Madrid a 18 de septiembre de 2020.REY;REINA;VESTIDO ROJO;OPERA;TEATRO REALJosé Oliva / Europa Press18/09/2020José OlivaEuropa Press

Me niego a que nos introduzcan en un bucle de miedo y negatividad. España, Madrid, es mucho más que el Covid. Me cuesta soportar tanta contradicción, tanta manipulación. Pienso qué planes perversos para destruir nuestra identidad nos acechan. Aprovechando este virus, el lado más oscuro de nuestra nación emerge tomando posiciones de forma antidemocrática. Sin dar explicaciones niegan al Rey desde Moncloa que presida, como siempre lo han hecho los Reyes desde hace 30 años, la entrega de despachos a los nuevos Jueces en la Escuela Judicial de Barcelona. En Zarzuela han tenido que emitir un comunicado diciendo: «El Rey quería ir al acto Judicial de Barcelona pero no tiene el refrendo constitucional del Gobierno». O dicho en otras palabras: el Gobierno le ha prohibido viajar. Así lentamente ante una nación aletargada van cumpliendo sus objetivos los socios comunistas de Sánchez, ex terroristas de Bildu y los separatistas catalanes. Cuando nos demos cuenta, España estará destrozada moral y económicamente. ¿Por qué en naciones como Grecia, Suecia, Alemania o Portugal no hay prácticamente Covid y los ciudadanos ni siquiera llevan mascarilla? ¿Somos diferentes o tenemos unos políticos incompetentes que no hacen demasiado porque salgamos de este descalabro liquidándonos moral y socialmente, un país en el que se están cargando la clase media que es el soporte de una sociedad avanzada? Mientras tanto, el único objetivo de Sánchez sigue siendo durar en la Moncloa, y lo conseguirá, pero sobre un país en ruina y fracaso.

Cuando les hablo de negar cualquier atisbo de alegría y vida normal es cierto, tarea difícil en un pueblo como el español, siempre dispuesto a tirarse a la calle para compartir unas cañas y alegría de vivir. El pasado viernes se inaguró en el Teatro Real la temporada de ópera presidida por los Reyes, una organización perfecta, todas las medidas higiénicas y sanitarias, y con un aforo inferior al habitual. Todo fue perfecto con «Un baile de Máscaras» en escena. Al día siguiente, sábado, otro acontecimiento cultural extraordinario sucedió en el Real. En conmemoración del 250 aniversario del nacimiento de Beethoven, bajo la batuta del fantástico director de orquesta Gustavo Dudamel al frente de la Orquesta del Teatro Real, se interpretó la «Novena Sinfonía». Puedo asegurarles que una gran emoción nos invadió a todos y fue maravilloso escuchar el Himno de La Alegría... La cultura también es Madrid, nuestra preciosa ciudad que algunos pretenden demonizar y convertirla en apestada. Pues no, señores, no. Madrid sigue viva, hay teatros, conciertos y muchas terrazas con ciudadanos que las disfrutan y unas calles en las que todo el mundo lleva mascarilla.

Ayuso no tiene la culpa de los contagios, estos suceden por la irresponsabilidad de muchas personas y la dejadez de la Policía al dejar ejercer en la noche la prostitución en la calle sin mascarilla. Hoy tenemos otro acontecimiento importante en Madrid con la apertura de puertas del Hotel Four Season, una obra impresionante en uno de los más bellos edificios de la capital. Y lo que es aún mejor, de forma espontánea ya entró su primer cliente, un matrimonio de origen árabe. Ayer estuve cenando también en un restaurante dirigido por Dani García y fue una experiencia para los sentidos de la vista y el gusto. Feliz fin de semana, España. Saldremos de esta.