Prohibido despertar a su majestad

Cualquier británico mataría por saber antes que nadie si el bebé que acaban de tener los duques de Cambridge es un niño o una niña.

Cualquier británico mataría por saber antes que nadie si el bebé que acaban de tener los duques de Cambridge es un niño o una niña. Sin embargo, por protocolo, Isabel II será la primera persona en tener esa información. Aunque, eso sí, si el parto es por la noche, la soberana no será despertada y sus asesores esperarán hasta el día siguiente para darle la nueva buena. Conclusión: el pueblo tampoco podrá conocer la información hasta que salgan los primeros rayos de sol. La cuestión es: ¿romperá Kate las reglas de palacio y presentará su retoño a su madre antes que a la abuela de su marido? En los mentideros ya se hacen apuestas, ya que, debido a lo unida que está la familia Middleton, la duquesa de Cambrige ha pedido que su hermana Pippa, y su madre, Caroline, estén presentes en el hospital llegado el momento por si al príncipe Guillermo no le da tiempo a acudir debido a sus compromisos laborales. Aunque la joven se encuentra ya en Londres por consejo médico, su marido continúa con su trabajo como piloto de búsqueda y rescate en Anglesey, Gales, por lo que si el parto va rápido, podría perderse el momento del nacimiento.

No sería la primera vez que la familia de Kate se entera primero de una gran exclusiva. Ya pasó con la noticia del embarazo. Debido a que la joven sufrió una hiperemesis gravídica por la que tuvo que se ingresada, el estado de buena esperanza se tuvo que hacer público antes del primer trimestre de rigor. La duquesa comenzó a sentir molestias durante el fin de semana estando con sus padres, en la casa que estos tienen en Bucklebury, Berkshire, mientras que Guillermo pasaba el fin de semana con los amigos. Pero viendo que las cosas empeoraban, fue a buscarla y la llevó él mismo en su coche hasta el hospital. Allí comenzó otra historia paralela, la de la enfermera Jacintha Saldanha, que se suicidó tras revelar datos del estado de la duquesa a un medio de comunicación australiano durante una broma telefónica. Debido a cómo ocurrieron los acontecimientos, la Prensa aseguró que la soberana se enteró del embarazo el mismo lunes. Pero las prisas no impidieron que publicara un comunicado anunciado lo feliz que se encontraba. Por otro lado, aunque Kate siempre ha expresado su deseo en recuperarse del parto en el domicilio de sus padres, por razones de seguridad, los expertos le han aconsejado que escoja una de las residencias de la reina.