Estos son los cinco limpiadores de hogar más peligrosos para la salud

Los hogares están llenos de productos de limpieza. Así, en las casas se pueden encontrar limpiadores específicos para hornos, cristales, inodoros, suelos... una gran variedad de productos que en muchos casos pueden ser peligrosos para la salud, tanto para los humanos como para las mascotas y el medio ambiente.

Los detergentes, desinfectantes y desengrasantes que usamos de forma habitual para eliminar la suciedad pueden contener sustancias como formaldehído, metanol, hipoclorito de sodio, amoníaco o ácido clorhídrico, entre otros muchos tóxicos que son perjudiciales para la salud si se inhalan o entran en contacto con la piel. Además, estos ingredientes contaminan el agua y son perjudiciales para la naturaleza.

Entre estos productos peligrosos que se pueden encontrar en cualquier hogar, la OCU ha destacado los cinco más dañinos.

Limpiadores de inodoro

Los productos específicos para eliminar la suciedad y desinfectar los inodoro suelen contener más ácidos que los limpiabaños generales, según la OCU y, por tanto, son más agresivos. También, según destaca Euroinnova, pueden llevar paradiclorobenceno, que ocasiona daños en los ojos, la nariz y el sistema nervioso, y fenol, un elemento cancerígeno y tóxico para las personas.

Además, destacan que los que se presentan en bloques llevan perfumes y colorantes que pueden contaminar el agua. Por otra parte, estos productos pueden ser peligrosos para los niños porque pueden acceder a ellos fácilmente y pueden ingerirlo o tocarlos y luego llevarse la mano a la boca. En este caso, los estudios realizados por la Organización de Consumidores asegura que no son especialmente eficaces y es mejor evitarlos. Para la limpieza de los baños recomienda los productos tradicionales.

Limpiadores para hornos

Los productos de limpieza para hornos son especialmente fuertes y corrosivos. En muchos casos contienen sosa cáustica, un producto altamente peligroso, por lo que hay que seguir cuidadosamente las instrucciones de seguridad. Según el estudio, son bastante eficaces para quitar la grasa del horno, pero se recomienda limpiar siempre el horno una vez utilizado para quitar la suciedad con más facilidad y no tener que recurrir a productos tan agresivos.

Además, los desengrasantes contienen disolvente butilo tóxico, que pueden dañar el hígados, los riñones o el sistema nervioso.

Desatascadores de tuberías

Las tuberías que se atascan por el cabello que se cae en la ducha, el jabón o los geles de baño, son un clásico en los hogares. Para desatascar las bajantes se pueden utilizar productos específicos que son muy agresivos ya que contienen sustancias corrosivas, como la sosa cáustica o la lejía. La OCU destaca que son eficaces pero que antes de utilizarlos se deben poner en práctica alternativas más inocuas. Así, se pueden instalar válvulas de desagüe desmontables o utilizar el tradicional desatascador de ventosa.

Desinfectantes

Los productos desinfectantes no son necesarios, salvo en casos excepcionales, y los distintos enseres del hogar se pueden limpiar simplemente con agua y jabón. El uso de desinfectantes, además, puede crear resistencias bacterianas y dañar el medio ambiente.

Ambientadores

El uso de ambientadores y difusores de aromas se utilizan en multitud de hogares, especialmente en los cuartos de baños, para enmascarar otros olores. Sin embargo, utilizan sustancias y disolventes potencialmente nocivos para la salud, especialmente en sujetos sensibles. De esta forma pueden provocar o empeorar enfermedades como el asma, la bronquitis o las migrañas.