El motivo por el que no deberías lavar las toallas con la ropa al mismo tiempo

Lavar la ropa y las toallas juntas en la lavadora puede parecer una opción práctica y eficiente, pero esta costumbre podría no ser la mejor idea. Mezclar ambos tipos de textiles no solo afecta la limpieza, sino también la durabilidad de las prendas y la higiene general.

Las razones para lavar por separado

Uno de los principales problemas de lavar toallas con ropa es que las toallas desprenden pelusa, la cual puede adherirse a otras prendas, especialmente a aquellas de tejidos más delicados como algodón fino o poliéster. Esto puede hacer que la ropa luzca desgastada y poco cuidada.

Además, las toallas están diseñadas para absorber grandes cantidades de agua, lo que puede hacer que la lavadora trabaje más y reduzca la eficacia del detergente y el enjuague en el resto de la carga. Esto significa que la ropa puede no quedar tan limpia como debería.

Otro factor clave es la diferencia en los niveles de suciedad. Las toallas suelen acumular bacterias, células muertas y humedad, lo que las convierte en un caldo de cultivo para microorganismos. Al lavarlas junto con la ropa, existe el riesgo de que estos gérmenes se transfieran a las prendas, afectando la higiene de la colada.

Cómo lavar las toallas correctamente

Para asegurar una limpieza efectiva y prolongar la vida útil de las toallas y la ropa, los expertos recomiendan seguir estas pautas:

• Lavar las toallas por separado, con agua caliente si es posible, para eliminar bacterias y residuos de manera eficaz.
• Usar menos detergente, ya que un exceso puede dejar residuos en las fibras y hacer que las toallas pierdan suavidad.
• Evitar el suavizante, porque puede reducir la capacidad de absorción de las toallas con el tiempo.
• Secarlas completamente antes de guardarlas para prevenir malos olores y la proliferación de hongos.

Separar la ropa y las toallas en la lavadora no solo mejora la limpieza, sino que también ayuda a mantener ambas en mejor estado por más tiempo. Un pequeño cambio en la rutina de lavado puede marcar una gran diferencia en la higiene y durabilidad de las prendas.