Manises

Fabra afirma que lo que «sale» sobre el caso Emarsa le «avergüenza»

VALENCIA- Ya lo había dicho la alcaldesa Rita Barberá, también el portavoz del PP en Les Corts, Rafael Blasco, y ayer fue el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, el que expresó lo que sienten los ciudadanos cada vez que se conoce algún dato nuevo de la escandalosa e impúdica, aunque todavía presunta, actuación de los gestores de Emarsa. «Lo que está saliendo sobre el caso Emarsa nos avergüenza como Administración y como sociedad».

Dicho esto, aseguró que su Gobierno va a trabajar desde la Generalitat y las Conselleries para que «den luz sobre este asunto». Además, se comprometió a instar al resto de administraciones a que hagan lo propio.

Insistió en que los ciudadanos no pueden ver a la Administración como un problema y, precisamente, eso es lo que ocurre cada vez que uno de los casi 20 imputados acude a declarar ante el juez. Por ello, insistió en que «vamos a colaborar al máximo para que esas personas que han hecho un mal uso de un recurso de todos, puedan enfrentarse a los tribunales y que ellos, que son los que han realizado esta malversación de fondos, paguen».
En este último punto matizó que deben pagarlo ofreciendo todos los datos que sean necesarios para que, al final, el juez tenga que tomar su decisión».

A pesar de la contundencia de sus palabras, Fabra insistió en respetar la presunción de inocencia de Enrique Crespo, vicepresidente de la Diputación de Valencia y alcalde popular de Manises. Crespo está imputado en el caso, aunque todavía no ha ido a declarar. Es decir, que descartó por el momento su expulsión del partido.

Así, hasta ahora el único que ha aportado alguna pista sobre cuándo puede producirse esta decisión, es el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus. El también presidente del PP de Valencia vino a decir que la expulsión de Crespo del partido no se produciría hasta que el juez le tomara declaración, igual que ocurrió con el ex alcalde pedáneo, Esteban Cuesta, quien ha sido suspendido de militancia.

Fabra insistió ayer en que, para salir de la actual situación de crisis, hay que «apretarse el cinturón» y, por ello, ha marcado un límite de 20 euros a los menús diarios de los altos cargos del Consell, que deberán enviar las tradicionales felicitaciones de Navidad vía internet. También ha solicitado reducción del uso del teléfono móvil.