Elecciones municipales

El «aplausómetro»

Si ayer se hubiera colocado un «aplausómetro» en la Asamblea de Madrid hubiera medido con precisión el nivel de cohesión de los grupos parlamentarios. La segunda y última jornada del Debate sobre el Estado de la Región ofreció una radiografía de la situación interna con la que comienzan el curso político PP, PSOE e IU.

El «aplausómetro»
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En el caso de los populares, el «aplausómetro» registró una ovación cerrada y sonora tanto en las réplicas y contrarréplicas de Esperanza Aguirre como en la intervención del portavoz del grupo, David Pérez. No hubo fisuras a la hora de respaldar la gestión de los últimos tres años así como las propuestas austeras que ofreció la presidenta regional.

Muy diferente resultado hubiera dado el medidor de aplausos durante la intervención de la portavoz socialista, Maru Menéndez. Y es que, el proceso de primarias en el que está inmerso el PSM pasó factura entre los diputados. Menéndez no siempre contó con las palmas de su bancada e incluso algunos compañeros no llegaron a levantar la vista de sus papeles en las intervenciones de la portavoz.

Frente a otros años en los que IU y PSOE eran uña y carne, en esta ocasión se evidenció la ruptura de las dos formaciones a cuenta de la huelga general y la política económica del Gobierno de Zapatero. De esta manera, el portavoz de IU, Gregorio Gordo, sólo logró arrancar el aplauso de sus once compañeros de filas y, de forma tímida, de las diputadas del PSOE: Maru Menéndez, Matilde Fernández y Rosa María Alcalá.