Duro golpe policial al narcotráfico

BARCELONA- La cada vez mayor presión policial sobre el narcotráfico en Cataluña está dando sus frutos. En los últimos días, la Policía Nacional ha detenido a 20 personas en dos operaciones contra el tráfico de estupefacientes, en las comarcas barcelonesas del Vallès Occidental y Maresme. Se han decomisado hasta casi tres kilos de cocaína, 5,6 kilos de hachís, 220 gramos de marihuana y más de 23.000 euros en efectivo.Según informaron ayer fuentes policiales, la investigación de la banda del Vallès empezó en septiembre de 2009 y permitió detener a quince individuos, intervenir 2,5 kilos de cocaína y 5,5 de hachís, además de desmantelar un laboratorio en Terrassa donde se procesaba la droga.Los agentes identificaron primero al jefe del grupo, que estaba organizado de manera piramidal, un colombiano responsable de adquirir la droga y suministrarla a los vendedores a través de dos lugartenientes. Llevaban un elevado tren de vida, con vehículos de alta gama, ropa de marca y aparatos electrónicos de última generación. Del resto de integrantes, algunos operaban desde sus viviendas en Terrassa, Cerdanyola del Vallès y Barberà, donde almacenaban los estupefacientes y luego los distribuían a otros «camellos» que vendían la droga a menor escala. En total, se efectuaron cinco registros domiciliarios en Barcelona, Cerdanyola del Vallès, Terrassa, Barberà del Vallès y Mollet, interviniendo, además de la droga, diez plantas de marihuana y dos prensas hidráulicas.En la operación en el Maresme, que se saldó con cinco detenidos, los investigadores detectaron a un cargo intermedio del grupo de «narcos» que vivía en el barrio de Cirera y que se encargaba de abastecerse de cocaína en el domicilio barcelonés del principal proveedor. La Policía registró domicilios de Barcelona, Mataró, Caldes d'Estrac y Sant Vicenç de Montalt, e intervino, además de la droga, una placa auténtica de los Mossos d'Esquadra.