Gadafi espera su sepultura

El cuerpo del ex dictador Muamar Gadafi yacía ayer en una cámara frigorífica en Misrata, a la espera de que el nuevo Gobierno libio decida qué hacer con él, tal y como confirmó a LA RAZÓN el comando militar de la ciudad rebelde, sin revelar las coordenadas de localización del refrigerador.

Estaba previsto que el coronel fuera enterrado ayer, ya que según el islam los muertos deben recibir sepultura a la mayor brevedad posible, pero las nuevas autoridades libias no quieren cometer errores y están decidiendo cuál es la mejor forma para que su despedida sea un adiós definitivo.

Asimismo, están manteniendo el procedimiento absolutamente en secreto, tal y como explicaron a este periódico fuentes de los combatientes, a los que se les ha ordenado no difundir información. Gadafi será probablemente enterrado en un lugar desconocido para que nadie pueda ir a su tumba, ni para honrar al ex líder ni para intentar profanarla. Asimismo, se le dará sepultura según el rito islámico, como a «todos los muertos de esta guerra», explicó el Consejo Militar de Misrata a este periódico. La ceremonia debería de tener lugar con la presencia de miembros de su familia, tal y como establece la tradición islámica, pero al estar todos muertos o huidos, los rebeldes estarían negociando con su tribu para devolverle el cadáver de su miembro más célebre.

El retraso del entierro se debería también a que las autoridades están llevando a cabo más investigaciones sobre la muerte de Gadafi, sobre todo después de que la ONU haya pedido que se aclaren las circunstancias en las que fue abatido el coronel y ha expresado su preocupación respecto a la posibilidad de que fuera ejecutado por los rebeldes. La oficina de Derechos Humanos de la ONU ha recordado que es ilegal bajo la ley internacional ejecutar a un prisionero de guerra, sobre todo si éste es buscado por la Justicia, como en el caso de Gadafi, acusado de crímenes contra la humanidad por la Corte Penal Internacional de la Haya. Amnistía Internacional también pidió ayer que se investigue cómo murió Gadafi mientras que Human Rights Watch recordaba a las autoridades que ahora ha llegado el momento para reconstruir un nuevo país, basado en el respeto de los derechos humanos.

El Consejo Nacional Transitorio tiene previsto anunciar el mañana la «liberación» de Libia, desde su sede en Bengasi, donde fue creado al principio de la revuelta en marzo. A partir de esa declaración oficial, empezará la transición, ahora que los rebeldes controlan todas las ciudades de Libia y Gadafi ha muerto.

La declaración de victoria
Sus principales colaboradores y familiares también están muertos, arrestados, huidos o exiliados en el extranjero, y sólo el paradero de su hijo Seif al Islam sigue siendo incierto. La TV árabe Al Arabiya anunciaba ayer que había sido arrestado cerca de Zintan, en las montañas del oeste, mientras que pocas horas antes se rumoreaba que podría haber intentado salir de Libia rumbo a Níger. Sólo cuando haya evidencias gráficas de su captura o muerte, la saga Gadafi habrá terminado para siempre después de 42 años de dictadura.

Ejecutado
El forense que examinó el cadáver de Gadafi aseguró ayer a la cadena de televisión Al Arabiya que el tirano murió por un disparo en la cabeza. El médico Ibrahim Tika, cuyas afirmaciones contradicen la versión oficial ofrecida por las nuevas autoridades libias, afirmó que Gadafi estaba vivo en el momento de su captura. Los rebeldes repitieron ayer que murió desangrado.