Dónde están las estrellas del rock

El paso de los años y el peso de las tendencias parece que han reducido lo que un día fue imitado por millones de personas a un simple programa de marketing de ordenador. Lo que no queda claro es si tiempo atrás los grupos de rock generaron cantidades millonarias a las compañías y ahora, para seguir manteniendo esas cifras crean y diseñan a medida del consumidor.

No hace demasiado tiempo, Justin Bieber (que presentaba su primera y hasta el momento única película) plantó en Madrid a los fotógrafos durante más de dos horas para que finalmente, cuando apareció, ni siquiera se dignara a pararse mientras caminaba con andares de estrella.

Probablemente, en los próximos meses leamos un artículo en alguna revista americana en el que este joven de diecisiete años aparezca como el menor de 30 más influyente del planeta, aunque su música parezca hecha mediante ordenador, aparato que también utiliza el cantante, dj, mezclador y músico Moby.

Cuando sale de gira, los que trabajan en los departamentos internacionales de su discográfica lo pasan realmente mal para atender a la dificilísima personalidad de su estrella y sus un tanto excéntricas peticiones. Que no huela a comida a su alrededor: es vegano (no se alimenta de nada que no sea natural y haya encontrado la muerte de forma natural) y no se puede jugar con la inspiración de una estrella de rock. Su dieta se compone de verduras y frutas, y sin excesos. No es esa la actitud de los artistas de rock ‘n roll que se entendía por definición.

David Guetta, el dj de moda, lleva desde los ochenta girando el disco de fiesta en fiesta, haciendo remezclas de temas que ya alcanzaron su éxito, lo que trae a la memoria un software que inventó hace años una empresa sueca que servía para orientar y confirmar si la canción que pinchabas podía ser un single o no. Se basaba en los patrones de todos los temas que habían alcanzado un número uno y, dependiendo de los tonos, duración, melodía y alguna variable más te sentenciaba si esa canción se podía convertir en un hit o por el contrario pasar desapercibida.

Sólo si exceptuamos a los Red Hot Chilli Peppers, que por cierto, llevan más de treinta años tocando y que acaban de publicar disco (bastante más blando que los anteriores, a excepción de uno de los temas, que conserva esencias pasadas), a Coldplay, Lenny Kravitz, que no es un novato, y poco más, no aparecen en la lista de iTunes, que es la más fiable, ni un grupo auténtico que siga tocando rock n'roll.

La nómina de las diez canciones más escuchadas en Estados Unidos en 2011 está liderada por Lady Gaga, Natalia Kills, Robyn, Michael Jackson, Britney Spears, Justin Bieber, Katy Perry, Beyonce y Miley Cyrus. Excepto Jackson, que siempre estará en el «top ten», los demás resultan ciertamente curiosos. Lady Gaga tiene su mérito, pero muy pocos se pueden permitir una producción como la suya. En España, el pasado año los discos más vendidos fueron los de Carlos Baute, Rihanna, Eminem, Lady Gaga, Malú, Macaco, Black Eyed Peas y Shakira. Un poco más de lo mismo: ninguno de ellos destaca por ser una estrella del rock

Sin quitar mérito alguno a los citados Macaco y Malú (que alternan estilos diferentes), es un hecho que el rock ha abandonado un trono que durante muchos años presidió. ¿Será que los rockeros son ya demasiado viejos? o ¿puede ser que el público que consumía rock en cantidades industriales también ha ido cumpliendo años?

Cuestión de marketing
El rock ya no domina la lista de los más vendidos; sin embargo, tampoco parece que lo haga la música, sino más bien, una mera cuestión de marketing. Desde Bob Marley a David Bowie y de los Rolling hasta una banda como Depeche Mode, todos marcan una diferencia enorme con quienes hoy lideran el negocio: independientemente de la música que tocaran aquéllos sí eran estrellas de rock.

Larguísima vida al pop

A diferencia de la salud maltrecha del rock, el pop es un género que sí ha sabido adaptarse a los cambios tanto de la industria como del público. Desde sus orígenes, hace más de cuarenta años, el pop ha vivido una constante revolución y no ha dejado de sonar.

No sólo hablamos de Michael Jakson y Madonna, o de Cristina Aguilera y Black Eyed Peas, el pop, en cierta medida, es el género hacia donde tienden todos cuando se quieren hacer más comerciales y tener un mayor número de salidas en el mercado. ¿Y que es el pop si no es una mezcla de diferentes estilos musicales? Como su nombre indica, pop en realidad, procede
de la palabra popular, por tanto, comprende toda la música popular que tiende a ser comercial. Hoy en día artistas como Shakira, Kate Perry, Sugababes, Coldplay y The Jonas Brothers son quienes mandan en una industria que está en constante cambio.