Apretarse el cinturón

Zapatero me recordó ayer al cantante y humorista Pepe Da Rosa, cuando años atrás, con motivo de otras crisis económicas, cantaba esa pieza que comienza así: «Yo me aprieto, tú te aprietas y él se aprieta el cinturón; esta va a ser la receta pa arreglar la situación». Justo todo lo contrario de lo que ha venido haciendo hasta ahora el presidente del Gobierno. Primero, al no reconocer la existencia de la crisis durante la campaña electoral en el invierno de 2008; por cierto, que ayer repitió hasta la saciedad esa palabra otrora maldita, crisis, en su intervención. Después, al no tomar las medidas adecuadas para enfrentarse a la situación. Pero no sólo no hizo eso, sino que actuó en sentido contrario, porque Zapatero, en lugar de escuchar a Pepe Da Rosa, puso en el CD a Luisa Linares y su canción «Dinero al bote» y así ha estado dos años, venga gasto y venga déficit público. Hace pocas semanas se negaba a apretarse el cinturón, tal y como reclamaba el PP, y tal y como nos pedían desde Bruselas y desde otros Estados que forman parte del euro. Finalmente, ¡cómo habrá visto Z, o se lo han hecho ver Merkel, Sarkozy y puede que hasta Obama, la situación, para dar un giro total a su política económica y plantear lo que ya se califica como el mayor recorte del gasto social de la democracia! Eso supone también cesar a Cándido Méndez, el secretario general de la UGT y su compañero del alma, en su puesto fáctico de vicepresidente económico en la sombra. Me cuentan que Zapatero convocó ayer a su equipo de confianza en La Moncloa. Todos juntos entonaron su nuevo himno: el «resistiré» del Dúo Dinámico.