La nueva ley electoral cerca a Batasuna y a sus «protectores»

Batasuna tendrá más difícil colarse en las instituciones, aunque lo intente a través de listas electorales de partidos legales como EA. Y es que la Comisión Constitucional del Congreso aprobó ayer la propuesta de PSOE y PP para reformar la legislación electoral con este propósito. La iniciativa salió en contra del PNV e IU mientras que CiU optó por la abstención. La reforma se hará en el marco de las modificaciones de la Ley Electoral en la que el Congreso trabaja desde hace un año. Con el acuerdo de ayer aún no se modifica la legislación, si bien ahora se plasmará en una proposición de ley articulada. Los cambios pasan por ampliar los plazos para impugnar listas sospechosas con el fin de tener más tiempo para evitar que concurran en elecciones y que tomen posesión de sus cargos, por anular listas de un partido legal por la presencia «contaminante» de candidatos de la izquierda abertzale ilegalizada, y por aplicar una «incompatibilidad sobrevenida» a los cargos deformaciones ilegalizadas después de celebrados los comicios.Además de acabar con los resquicios que puedan ser utilizados por Batasuna, la reforma de la Ley Electoral de 1985 introducirá también cambios en el voto emigrante, el recorte de gastos electorales o la desactivación de los tránsfugas en los ayuntamientos, cuyo papel será irrelevante en las mociones de censura. La redacción de la proposición de ley dejará clara la exclusión de los residentes en el extranjero en las elecciones locales y la votación en urna en consulados y embajadas para los emigrantes. Se prevé además la prohibición de actos de inauguración en campaña, la eliminación de la publicidad política y la reducción de un 15 por ciento de los gastos electorales.El informe aprobado ayer deja fuera –hasta lograr una redacción técnica adecuada–, la extensión a las televisiones privadas de los requisitos de pluralidad y proporcionalidad que rigen para las públicas en campañas electorales. Las «pistas» que apuntan la negociaciónLa ex presidenta del PP vasco María San Gil dijo ayer que hay una «serie de pistas» que llevan a pensar que existe una «clara voluntad» de que se genere un nuevo proceso de negociación con ETA y con los «batasunos», sumándose así a la tesis del eurodiputado popular Jaime Mayor Oreja. San Gil, que lleva más de dos años apartada de la política, hizo estas reflexiones en un almuerzo informativo en el que además apuntó que el presidente del PSE, Jesús Eguiguren, sigue siendo el «ariete que va marcando», al igual que hizo en la anterior negociación con la banda, «el camino que hay que seguir», informa Efe.