Atenas

Una misión especial del FMI el BCE y la UE pactará en Dublín el rescate irlandés

EE UU exige a la UE que actúe «muy, muy rápidamente» para contener la crisis de deuda europea. 

Fotografía del 10 de mayo de 2007 de personas caminando junto a una sede del Anglo Irish Bank (AIB) en Dublín (Irlanda).
Fotografía del 10 de mayo de 2007 de personas caminando junto a una sede del Anglo Irish Bank (AIB) en Dublín (Irlanda).larazon

Si la historia se repite, ninguna realidad más cíclica que la financiera. Los países del euro discutieron ayer la manera de contrarrestar el ataque de los mercados durante las últimas semanas. La frágil situación de la banca irlandesa, gravemente afectada por activos tóxicos, y la propuesta alemana para que los inversores también corran con parte de la reestructuración de la deuda de un país, han colocado al euro de nuevo contra las cuerdas, seis meses después de que la crisis griega obligara al préstamo de la eurozona y el FMI de 110.000 millones de euros para Atenas.

«Estamos en una crisis de supervivencia», clamó con dramatismo el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy. El presidente del Eurogrupo, que agrupa a los países del euro, el primer ministro luxemburgués Jean Claude Juncker, insistió en esta idea al comentar que «la estabilidad de toda la eurozona puede llegar a estar en peligro rápidamente». La prima de riesgo de la deuda irlandesa se volvió a disparar ayer en los mercados, y el país pagaba un interés del 8, 36% en los bonos a 10 años frente al 8,09% de la víspera. La española sufrió un ligero aumento hasta el 4,60%. Para abrir un cortafuegos que evite el contagio a las economías del sur, como teme Portugal, la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional negocian, junto con Dublín, un rescate que se centre en su castigada banca. Así lo confirmó ayer el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ya a la entrada de la reunión de los ministros de Finanzas de la eurozona en Bruselas.

Una misión formada por técnicos de los tres organismos se trasladará hasta Dublín para analizar sobre el terreno la reestructuración del sector bancario irlandés e «intesificar las discusiones técnicas», según dijo Rehn, que deberán ser «cortas y centradas», según matizó Juncker en la rueda de prensa posterior al Eurogrupo. Aunque el comisario consideró «prematuro» hablar de cifras, el plan podría rondar, según algunos cálculos muy preliminares, entre los 60.000 y los 100.000 millones de euros. El eurogrupo subrayó que un posible rescate de la banca irlandesa no implicaba menoscabar el esfuerzo realizado hasta ahora por el Gobierno irlandés para sanear sus cuentas, elogiado por sus socios europeos, y que acumula un déficit del 32% precisamente por las garantías que ha extendido a sus bancos. «Los problemas reales están en el sector bancario», resaltó Rehn, quien recordó que el programa en preparación todavía está a la espera de la petición del Gobierno irlandés para ser activado.

La resistencia de Irlanda para aceptar un rescate del fondo europeo de 750.000 millones de euros, creado tras la crisis de Grecia, ha puesto en el paredón de fusilamiento de los mercados a todas las economías periféricas del euro: Grecia, Irlanda, Portugal y España. Fuentes comunitarias, analistas y el BCE defienden reflotar cuanto antes a Irlanda, para evitar que Portugal y España terminen también bajo el agua.

«Con Grecia ya recibiendo ayuda y, presumiblemente, Irlanda y Portugal con bastante probabilidad beneficiarias de algún tipo de paquete de apoyo, los inversores empezarán a centrar su atención en España en algún momento», aseguró Simon Derrick, del Bank of New York Mellon. De llegar extenderse el contagio a España, la mayor de las economías en peligro, «la crisis estaría fuera de control», indicó Simon Tilford del Centro para la Reforma Europea.
Por otra parte, el secretario del Tesoro de EE UU, Timothy Geithner, pidió ayer a la UE que actúe «muy, muy rápidamente» y poner en marcha reformas que ataquen el problema con «algún tipo de respaldo financiero temporal».