Una red de «pisos solidarios»

En este sentido Gallardón presentó la iniciativa «Generación 2020», un programa intergeneracional dirigido a jóvenes de entre 15 y 29 años para favorecer la integración de las segundas y terceras generaciones de inmigrantes. Además, agradeció a los «nuevos madrileños» ser un «gran potencial de crecimiento económico y de cohesión social para la ciudad». Rafael Izquierdo, presidente de la Fundación Desarrollo y Asistencia, propuso «crear un abono para que los mayores puedan permitirse usar el taxi, debido a las dificultades que les supone muchas veces coger el transporte público». Una petición que Gallardón prometió que «iba a estudiar».

El alcalde explicó que se ampliará la ayuda a domicilio, garantizará la teleasistencia a todos los mayores de 80 años, se abrirán diez centros de día y ocho centros de mayores y se pondrán en marcha nuevos programas de ejercicio físico y mental para prevenir el deterioro de la memoria.
Asimismo, el edil anunció la creación de una red de doscientas «viviendas volidarias» que se pondrán en manos de fundaciones para dar soluciones residenciales a gente en situación de exclusión social grave y, de esta forma, recuperar el máximo desarrollo de la persona.
Gallardón también resaltó las medidas «Red 300», «Acude» y «Todos a la escuela», dedicadas a romper los estereotipos sexistas en los colegios, ayudar a las familias víctimas de violencia de género y a luchar contra el absentismo escolar en zonas problemáticas.