Una superoficina virtual también para pymes

Dos gigantes como Microsoft y Vodafone han unido esfuerzos en sus soluciones de oficina virtual con un acuerdo escenificado en el Mobile World Congress que se celebra estos días en Barcelona.

Al coordinar sus servicios en la nube ponen en bandeja que cualquier empresa de reducidas dimensiones pueda acceder a prestaciones que mejoran el trabajo diario y la coordinación a un nivel que ahora sólo está al alcance de las grandes corporaciones.

Los empleados de la firma podrán trabajar en equipo independientemente de dónde se hallen, sin necesidad de contratar potentes servidores o centralitas. Será fácil crear un entorno de trabajo virtual donde compartir documentos o realizar videoconferencias en cualquier soporte, un ordenador de mesa, portátil, tablet o smartphone.

Según Luis Martín, director de Innovación de Microsoft, "para una pyme, esta posibilidad supone un avance cuántico en su forma de trabajar. Además, es asequible, por un precio de entre cinco y diez euros a sumar a sus licencias de Office 365, la oficina en la nube de Microsoft".

Con este anuncio, el cliente de Microsoft Lync, la herramienta de mensajería instantánea y reuniones virtuales, se convierte en una extensión más de la solución de Comunicaciones Unificadas de Vodafone construida sobre Oficina Vodafone.

Este acuerdo permite a las empresas integrar de forma transparente los sistemas de información y las herramientas de productividad de la empresa con las comunicaciones fijas y móviles, tanto de voz como de datos.

Por su parte, Julián Oncina, director de empresas de Vodafone, considera que "esta solución aumentará la competitividad de las empresas y ahorrarán muchod costes"

Además del acuerdo con Microsoft, Vodafone ha presentado un proyecto piloto de la mano del Banco Santander y la Universidad Católica de Murcia por el queun estudiante provisto con un teléfono pueda acceder a determinadas zonas del campus, pagar en un autobús municipal o que el profesor certifique su asistencia a clase, todo ello gracias a la tecnología NFC. En unos años, se espera que el móvil reemplace a la tarjeta universitaria con chip, ampliando las funciones para el estudiante y el profesor.