CEOE

Rosell se impone con claridad en las elecciones de Fomento del Trabajo

Las primeras elecciones en 33 años de la patronal catalana Fomento del Trabajo Nacional terminaron con la reelección de Joan Rosell frente al aspirante, el director general de la multinacional Irestal, Joaquim Boixareu. El resultado, pese a la voluntad renovadora del segundo, no pudo ser más abultado: Rosell obtuvo 1.760 votos frente a los 866 del otro candidato.

Rosell seguirá presidiendo la patronal catalana Fomento de Trabajo
Rosell seguirá presidiendo la patronal catalana Fomento de Trabajolarazon

Rosell se presentaba a las elecciones con el lema «Renovar con sentido común», mientras que Boixareu, que forma parte de la junta directiva saliente, planteaba un cambio en las personas que dirigen la patronal catalana y una dirección menos presidencialista. «Fomento es la casa de todos, donde deben gobernar las amplias mayorías y no las minorías, por muy amplias que sean. Todo el mundo tendrá voz», señaló Rosell tras conocer los resultados.

A las urnas estaban llamados un total de 565 electores que, a su vez, representan 3.004 votos, ya que el peso de los electores varía según si representan a organizaciones sectoriales y territoriales o bien a empresas.

Lo cierto es que la victoria del presidente de Fomento tampoco fue una sorpresa dado que durante la recogida de avales ya había vencido por goleada a su rival: Rosell logró 204 y Boixareu, 60.

Respecto a su posible candidatura a la presidencia de la CEOE –esta victoria le da, en teoría, más posibilidades de cara a las futuras elecciones, que se convocarán mañana–. Pero Rosell prefirió no pronunciarse y aseguró que, por ahora, prefiere concentrar esfuerzos en la patrona catalana. «Primero debemos tener nuestro debate interno y ver lo que nos conviene, porque son ellos –la junta directiva– los responsables de incitarme o no a una aventura», subrayó el flamante presidente.

Casi 250 años después –Fomento del Trabajo Nacional es la patronal más antigua de Europa y sus orígenes se remontan al año 1771– , los 565 electores llamados a las urnas empezaron a llegar a la sede de Fomento del Trabajo de Barcelona sobre las 17:30 horas. Todos ellos debían depositar dos papeletas en urnas diferenciadas: por un lado, una con el nombre del futuro presidente, y por otro, la papeleta para elegir a los miembros de la junta, elección que se hace mediante listas abiertas.