Salomón Shang: «La Academia catalana es un circo»

–¿En qué situación se encuentra en estos momentos tras abandonar el miércoles la Academia de cine?
–El tema está en manos de la Policía. Mi abogado ha llevado ante los juzgados todo lo que tiene que ver con el correo anónimo que ha enviado esas falsificaciones. Sobre lo que tiene que ver con la Academia, habíamos iniciado el proceso de las acciones contra los miembros y su presidente Joel Joan, pero debido a que ayer han rectificado y reconocido la improcedencia de sus declaraciones y la falsedad de los correos, vamos a parar el asunto. Eso no interfiere que yo me haya dado de baja de la Academia.

–¿No va a regresar?
–No, porque estoy en total desacuerdo con la gestión de la junta. Entiendo que en una situación de crisis debería existir transparencia, y eso no ha sido así. Por principios, no puedo volver mientras no cambie la junta directiva.

–¿Tiene alguna sospecha sobre quién puede ser el autor de los correos?
–Sí, desde luego. Estamos prácticamente seguros de quién es. No es una sola persona, sino dos o tres haciendo fuerza. Es gente resentida con nosotros porque no han tenido el apoyo o no hemos colaborado como ellos hubieran querido. Seguramente se trata de antiguos colaboradores.

–Horas antes de empezar la gala se reunió con dos miembros de la Academia. ¿Qué le dijeron?
–Me pidieron que no hablara con ningún medio. Yo estaba en una situación muy complicada porque todos me estaban buscando para que contara qué estaba sucediendo. Me dijeron que habían intentado frenar el asunto y que si no hablaba al día siguiente el tema estaría olvidado. Sin emabrgo, los medios saltaron al cuello y a mí me dejaron solo.

–¿Ha hablado con Joel Joan?
–Después de las declaraciones que hizo el lunes, después de lo que él sabe que aprecio y respeto la Academia..., no saber nada es sinónimo de que no desea hablar conmigo.

–¿No le tienta la presidencia de la Academia o formar parte de una candidatura?
–Hay gente que, evidentemente, quiere presentarse a las próximas elecciones, que serán en breve. Quieren cambiar la dinámica de la Academia y dotarle de un aire más transparente. Apoyaría una candidatura unitaria. No estoy en contra de toda la junta, aunque creo que han hecho en este tema las cosas de muy mala manera, producto del egoísmo propio y típico con el que se hacen las cosas aquí.

–¿Qué le pareció que la Academia intentara competir en Hollywood con cintas en lengua catalana?
–Todo el mundo lo veía como una marcianada, pero apoyé a Joan y a la junta directiva. Después he sido el hazmerreír de la profesión en Madrid. Creíamos que había que hacerlo, aunque estábamos convencidos de que no iba a salir adelante, como así ha sido. La Academia nació y creció a partir de los escándalos. Creo que Joan ha potenciado nuestra presencia en los medios, pero ha pagado un precio muy caro, demasiado alto, como es convertir la Academia en un verdadero circo.