Felipe le hace la campaña a (Borja)

Madrid- No parece haber mucho «feeling» entre el ex presidente del Gobierno, Felipe González, y el secretario general de los socialistas madrileños, Tomás Gómez. Al menos ese era el ambiente que se respiraba ayer en la presentación de Borja Cabezón como candidato socialista por Majadahonda. Y es que aunque algunos puedan pensar que las discrepancias de ambos con el presidente del Gobierno les podrían unir parece que lo único que tienen en común es el deseo de conquistar para los de la rosa una plaza tan tradicionalmente del PP como Majadahonda.
A González le une una estrecha amistad con Cabezón por lo que ayer quiso estar en su puesta de largo. El ex presidente, que sólo tuvo elogios para su pupilo, no abundó en guiños al candidato madrileño que pese a la tozuded de las encuestas -incluso las que maneja Ferraz contemplan un descalabro del partido en la Comunidad- se mostró optimista «quedan 95 días para que en esta región vuelva a salir el sol». De esta forma el candidato socialista quiso seguir jugando con esta metáfora, que es la que ha utilizado desde hace una semana para referirse a las negociaciones internas que se estaban llevando a cabo en el seno del PSM con la lista de Jaime Lissavetzky después de que éste denunciase que Gómez había excluido de las mismas a sus afines.
En un intentó de hacer suyo el tirón del histórico dirigente socialista, Gómez se refirió a él como «nuestro Felipe» pero el ex presidente no quiso entrar en las disputas internas del partido y dedicó casi el cien por cien de su intervención, que se prolongó por espacio de más de 45 minutos, a hablar de la actual crisis internacional, «la peor desde 1929». Hoy Gómez tampoco estará entre amigos. José Blanco, con el que ha tenido enfrentamientos, le acompañará en la presentación del candidato por Leganés.