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El futuro de la operación Calderón en el aire

Aguirre cree que hay que cambiar el proyecto para que sea viable y el Ayuntamiento aboga por seguir adelante

El futuro de la operación Calderón en el aire
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MADRID-Tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) que rechaza el proyecto de construir varias torres de más de diez plantas en el ámbito Mahou-Calderón, la situación del convenio que, entre otras cuestiones, creará un nuevo barrio a orillas del Manzanares es muy delicada. Pese a que, en un primer momento, tanto la Comunidad como el Ayuntamiento de Madrid consideraron la posibilidad de recurrir dicho fallo, poco después optaron por acatar la sentencia y buscar una solución entre las administraciones y empresas afectadas.
Precisamente para acatar la decisión del TSJM, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, afirmó ayer que se debe modificar el convenio entre el Ayuntamiento de la capital, el club Atlético de Madrid y la empresa Mahou para que el proyecto pueda salir adelante. Según su punto de vista, el consistorio debería reducir los aprovechamientos urbanísticos de estas entidades por los que a cambio debían construir una nueva zona verde y soterrar la M-30 a su paso por el estadio Vicente Calderón, así como dotar de infraestructuras al nuevo barrio.
En respuesta, el vicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva, aseguró que mantendrán «la lealtad y la coordinación institucional» con el Gobierno regional tal y como se ha hecho durante toda la operación Mahou-Calderón. En este sentido detalló que el gasto en infraestructuras que están obligadas a levantar las empresas beneficiadas por el cambio de uso de los terrenos está equilibrado por las plusvalías que recibirán al construir viviendas en la zona, según indica la Ley del Suelo.
Por su parte, las empresas afectadas optaron por esperar al acuerdo entre las administraciones para entrar a valorar las consecuencias del fallo del TSJM. Desde la empresa cervecera prefirieron no entrar a valorar el futuro del ámbito, mientras que el Atlético de Madrid aseguró que la reforma del estadio de La Peineta –donde se trasladará el equipo tras derribar el Vicente Calderón– continúa adelante. La constructora FCC, responsable de todas las obras, decidió también esperar la decisión de la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid respecto al proyecto.

Limitación de altura
La sentencia del TSJM estimaba parte de la denuncia realizada por la asociación Señales de Humo contra varios aspectos de la operación. En concreto, recordaba que la Ley del Suelo de la Comunidad de Madrid establece un límite de tres alturas más ático en todas las viviendas construidas en los nuevos desarrollos, lo que entraba en conflicto con el proyecto de levantar varias torres en los terrenos que ocupaba la antigua fábrica de Mahou.
De hecho, aunque existen excepciones a esa limitación de altura que están contempladas en la misma Ley del Suelo, el fallo del TSJM señala que no se deben considerar como «edificios singulares» todos los inmuebles previstos en el proyecto, que también contempla varias casas de cuatro alturas en la zona más cercana al río. Así, una parte importante de la zona residencial planeada no deberá modificarse y serán las torres de mayor altura las consideradas excepcionales para cumplir con todas las condiciones de la ley regional.


Un parque, viviendas y el adiós a la M-30
El convenio Mahou-Calderón supone la demolición del estadio del Atlético de Madrid y de la antigua fábrica de Mahou para, construir viviendas, un gran parque y soterrar la M-30 que pasa por debajo del Vicente Calderón. En 2007 se presentó un proyecto provisional que incluía inmuebles de cuatro alturas y torres de más de diez plantas.