Cataluña

Sánchez-Camacho plantea disminuir el coste de las diputaciones y rechaza las nuevas veguerías

A estas alturas de la crisis económica, ya nadie pone en duda que es imprescindible disminuir el coste de las administraciones públicas. Se han dado varios pasos en este sentido, pero el PP aboga por ir más lejos

La Razón
La RazónLa Razón

La presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, puso ayer en su punto de mira a las diputaciones provinciales. «Habría que valorar su situación y, sobre todo, el tratatamiento en lo que respecta a los sueldos y a los cargos en las diputaciones. Y también ver sus competencias reales porque ahora tampoco tienen unas competencias que suponga muchas veces los costes que están generando en gestión de personal», afirmó en una entrevista a Catalunya Ràdio.

Todas las diputaciones de Cataluña han reducido su presupuesto de cara a 2011, aunque manejan cifras muy importantes que escapan, demasiado a menudo, a la vigilancia de los medios de comunicación. Las cuentas de la corporación de Barcelona para este año superan los 600 millones de euros, mientras que las de Tarragona están por encima de los 125 millones, las de Girona rebasan los 100 millones y las de Lleida se quedan en 95 millones.

Sánchez-Camacho también analizó el resto de administraciones intermedias. Rechazó la creación de las veguerías –que, de hecho, están congeladas– y también se mostró partidaria de suprimir los consejos comarcales, un tipo de administración que no es común en el resto de comunidades autónomas.

Lo cierto es que por lo que respecta a las veguerías está claro que no van a prosperar a corto plazo. Así lo ha manifestado la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, que no ve urgencias en este sentido, ya que la crisis obliga a observar otras prioridades