Francia

Bocados con el sabor del Olimpo

Los forofos del queso estamos de enhorabuena. Sobre todo, porque descubrir las denominaciones de origen nacionales de este maravilloso producto, así como las delicias internacionales y las pequeñas joyas de productores artesanales, resulta una tendencia gastronómica para saborear despacio

Un queso digno de exposición
Un queso digno de exposiciónlarazon

Si ya éramos asiduos incondicionales de las variedades que ofrece Poncelet, tienda de referencia en Madrid fundada por Jesús Pombo, lo último es hacerse con una mesa en Cheese Bar (www.ponceletcheesebar.es), donde el comensal puede desayunar, comer y cenar las recetas, que les dan con queso, supervisadas por Joaquín Felipe, chef del Hotel Urban y Villa Real. En Los quesos de L'Amelie (C/ Torrecilla del Puerto, 5. Local 1. Madrid. Tel. 91 388 12 65), pida asesoramiento a Javier García Albarrán antes de decantarse por un bocado nacional, así como de Italia, Inglaterra, Suiza y Francia.

Y es desde el país galo de donde procede Caprice des Dieux, el queso puro, fresco y cremoso con matices a nata, de Arias, elaborado con leche de vaca pasteurizada, que hoy degustamos. ¿Su creador? Jean-Noël Bongrain, propietario de una fábrica familiar, situada en Illoud, quien, antes de dar con la fórmula redonda, estudió, probó e investigó el sector lácteo durante cinco años. El resultado: este producto exquisito de pasta blanda y receta única que destaca por su corteza inmaculada y su doble textura, ligera e untuosa.

Caprice des Dieux, de Arias, presenta esta temporada «Chic Gourmet» para reivindicar su origen francés allá en los 50. Década en la que el manjar, cubierto con un envoltorio de forma ovalada de clara identidad francesa, que le diferencia de otros productos, comenzó a presidir las mesas, tanto durante las inminentes fiestas navideñas como a diario, adquirido en tiendas especializadas y en mercados.

Fue en el de París donde, seis años más tarde, cuando comenzó a ver la luz después de que Jean-Noël optara por regalarlo a los visitantes antes de ofrecerlo en una quesería de Saint-Ouen al precio de 50 céntimos de franco.

En los 60, tras ocupar todos los rincones «gourmets» de Francia, se exporta a Bélgica, Suiza y Alemania, y en los 70 llega a nuestro país. Hoy no falta en las estanterías de las tiendas especializadas de referencia y puestos de los renacidos mercados de Madrid, que aúnan tradición y modernidad, entre ellos, los de San Miguel y San Antón, ambos con zonas para degustar los productos adquiridos. Son rincones en los que hacer la compra se convierte en una experiencia para conocer las tendencias gastronómicas del panorama culinario. De visita obligada es el restaurante del segundo, cuyo chef prepara la carne o el pescado recién adquirido con un envasado especial para el «Cooking de la Cocina de San Antón».
 

 

Un queso digno de exposición
El Chic Gourmet es un queso destinado a seducir los cinco sentidos, de ahí que no pueda faltar una apuesta por lo visual. Tanto es así que el fotógrafo Paco Peregrín mostró en el madrileño mercado de San Antón las imágenes que recogen el suculento universo Chic Gourmet durante la presentación de este manjar único. Premio Nacional de Fotografía Profesional LUX oro en Moda y Belleza, su obra es una mezcla perfecta de sensibilidad y vanguardia que se refleja en el misterioso aura que envuelve sus trabajos.