CiU aprueba los presupuestos que acreditan los recortes gracias al PP

Los trabajadores del sector de las ambulancias, en huelga hasta el viernes, trasladaron ayer su protesta contra la congelación de sus salarios a las puertas del Parlament, donde el Govern logró sacar adelante los presupuestos de 2011 con la complicidad del PP y también de Joan Laporta. La rprotestas de médicos, enfermeras, profesores y sindicatos varios no impidieron que el Parlament diera luz verde a los presupuestos de los recortes.

Las cuentas con las que Artur Mas y Andreu Mas-Colell se estrenan en el Govern serán recordadas por su austeridad. Por primera vez en años, los presupuestos no crecen, sino que reducen el gasto hasta un 10 por ciento respecto a 2010 para rebajar el déficit público del 3,9 por ciento a un 2,6 por ciento del PIB. Pese a este esfuerzo, a través del cual, el Govern ahorrará 2.860 millones, el déficit duplica el objetivo pactado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

Los compromisos del PP
En su intervención, el PP destacó los compromisos que ha arrancado a CiU a cambio de su abstención, como el ahorro de 1.200 millones de euros mediante la reducción de empresas públicas o la racionalización de las polémicas «embajadas». El diputado José Antonio Coto reivindicó que las propuestas de los populares han salvado la sanidad y la educación «universales». Coto reiteró la idea de que el PP se abstiene por «responsabilidad», porque «Cataluña no podía estar más tiempo parada, sin presupuestos».

Laporta, por su parte, expuso que «pese que el pacto CiU-PP me da ganas de votar en contra, votaré a favor por responsabilidad».Los presupuestos salieron adelante con 62 votos a favor, 18 abstenciones y 54 en contra (el PSC, ERC, ICV, Ciutadans y SI).

Los partidos de izquierda criticaron con dureza «los presupuestos de los recortes sociales» durante unos largos 110 minutos. La diputada socialista Rocío Martínez-Sampere denunció que las cuentas «son inasumibles para quien tenga una mínima sensibilidad social», tras criticar que CiU sólo ha querido negociar con el PP. Lamentó que el Govern no haya apoyado ni una de las 514 enmiendas de los socialistas, «ni la 105, que defiende un proyecto para construir una escuela en Olèrdola (Barcelona) a coste cero». En nombre de CiU, Antoni Fernández Teixidó le respondió con las palabras que utilizó el ex conseller de Economía, Antoni Castells, hace un año, para rechazar las enmiendas de CiU, «no las aceptamos para que la coherencia –del proyecto– no se tambalee».
La deuda del ACA

La intervención de Fernández-Teixidó reanimó una sesión monótona, sobre todo, cuando recordó que Joan Boada (ICV) dijo que «la derecha es una fanática del dolor». ICV y ERC también reprocharon a CiU el pacto con el PP. Y Fernández-Teixidó les tendió la mano para pactar los presupuestos de 2012. De momento, ayer, CiU volvió a cerrar un acuerdo con el PP. Llegaron a un arreglo para subir el canon del agua un 8,5 por ciento. La pretensión de CiU era subir la tarifa un 9,5 por ciento para afrontar a la deuda de 1.300 millones de euros que arrastra la Agència Catalana de l'Aigua.