La «crisis del pepino» arruina la campaña de la fruta de verano

Valencia- La campaña de fruta de verano se ha visto este año empañada por la tristemente famosa «crisis del pepino», que afectó gravemente a la comercialización de frutas y hortalizas españolas a partir del pasado mes de mayo.
El daño a la imagen de los productos del país ha provocado enormes caídas en los precios, que van desde el 45 por ciento en el caso de la fruta de hueso (melocotón, nectarina, albaricoque y ciruela), hasta el 60 por ciento en el caso del pepino o el 70 en el calabacín.
En otros casos, los perjuicios han llegado a provocar la destrucción de la producción, como en el del melón y la sandía, ya que los precios ofertados (0,05 euros por kilo o incluso 0,01 euros por kilo), ni siquiera alcanzan a cubrir no ya los costes de producción, sino los de recolección.
Estos datos se desprenden de un informe elaborado por la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA), para analizar las consecuencias de la «crisis del E.coli» sobre la campaña de la fruta y verdura de verano. Dicho estudio concluye de forma tajante que la actual es, sin duda alguna, la peor de la última década.
AVA estima que, atendiendo a la banda de cotizaciones más habituales -máxima y mínimas- en las que se han situado durante junio y julio los principales cultivos de temporada valencianos y su diferencia con los costes de producción, las pérdidas ocasionadas por esta crisis a los agricultores valencianos sumarán algo más de 19 millones de euros.
A estas pérdidas cabría descontar parte de los 4,05 millones de euros que finalmente recibirá la Comunitat Valenciana con arreglo a las indemnizaciones que la Comisión Europea (CE) decidió arbitrar para compensar a los damnificados. Aún así, AVA señala que la Comunitat quedará muy lejos de resarcir por esta vía los perjuicios ocasionados.
El presidente de AVA, Cristóbal Aguado, explicó que las ayudas que recibirán los agricultores valencianos son una «anécdota» en comparación con las pérdidas reales de todo el sector. Además, lamentó que países como Holanda, Italia o Francia, que se beneficiaron de la crisis en España, reciban también ayudas de la UE.