Un medio de Sant Boi denuncia intimidación del alcalde

Barcelona- Dos inspectores municipales, escoltados por otros dos policías, irrumpieron el 23 de marzo en la redacción de «El Llobregat» para comprobar si se habían retirado unos tabiques de pladul y un falso techo de yeso, basándose en un acuerdo de la comisión de gobierno municipal del 9 de julio de 2001, un acto que los representantes del medio han calificado de «intimidación y atropello» por parte del alcalde de Sant Boi, Jaume Bosch.

Esta intervención se produjo días después de que «El Llobregat», que distribuye 25.000 ejemplares gratuitos en cuatro ediciones mensuales en el Baix Llobregat, informara sobre un presunto tráfico de influencias y supuestas irregularidades urbanísticas cometidas por el alcalde durante el proceso de tramitación de los permisos de obras de la nave de la empresa Azkar, propiedad de un amigo del ex ministro José Blanco, una acción por la que el edil tuvo que declarar ante el Tribunal Supremo en el marco del conocido «Caso Campeón». Según un portavoz de «El Llobregat», «el "Caso Campeón"ha sido la puntilla». Bosch ya había mostrado su descontento a los responsables del medio por las informaciones publicadas acerca de la responsabilidad subsidiaria del Consistorio en el derrumbe del túnel de bateo de béisbol, que en 2009 acabó con la vida de cuatro niños. O por las sospechas creadas por este medio entorno a la prejubilación de Bosch como directivo de Caixa Penedès con sólo 52 años, cuando en la actualidad la Fiscalía Anticorrupción investiga las jubilaciones de oro que en los últimos años se han concedido los altos cargos de la entidad.

Los responsables de «El Llobregat» ven en la irrupción de los inspectores un atentado contra la libertad de prensa, como así han denunciado ante el Consell de la Informació de Cataluña. Alegan que el acuerdo administrativo invocado fue dictado hace 11 años, contra una persona que se sabe que vendió la finca en 2002, y que «El Llobregat» es sólo el arrendatario del local.