Cientos de islamistas queman dos iglesias cristianas en Java

Los violentos actos se produjeron después de que un juzgado de la región de Java Central sentenciase a Antonius Bawegan, de 58 años, a cinco años de prisión, el máximo permitido por la ley, al hallarlo culpable de distribuir panfletos insultando al islam, informa la agencia Efe.

La «levedad» de la sentencia llevó a más de 1.500 personas a salir a la calle para protestar y pedir la pena de muerte para el condenado. La muchedumbre tiró piedras a la Policía, que respondió con gases lacrimógenos y disparos de advertencia al aire, indicó la agencia de noticias Antara.

Durante la protesta, el gentío coreó cánticos de «muerte, muerte, muerte» y «quemar, quemar, quemar», mientras prendían fuego a las iglesias. Las protestas se produjeron dos días después de que un grupo de islamistas matase a seis miembros de la secta minoritaria musulmana Ahmadiyah con machetes y piedras en el este de Java.

Se trata del último episodio de conflictividad religiosa en el país con mayor población musulmana del mundo, mientras aumenta la presión hacia el Gobierno para que contenga los extremismos religiosos. Una reciente serie de ataques dirigidos contra iglesias obligó a la Policía a emplear medidas de mayor seguridad para las fiestas de Navidad y Año Nuevo el mismo día en que se efectuaron disparos a través de las ventanas de la iglesia cristiana Muria, miembro de la Conferencia Mundial Menonita, en Surakarta (Java Central). No muy lejos de la zona, dos bombas de fabricación casera fueron descubiertas cerca de otras iglesias. Una explotó sin causar víctimas y la otra fue desactivada. Días después varios cócteles molotov fueron arrojados en la Iglesia Rey Católico, dañando la pared del templo.