Otro fracaso del diálogo social

A las puertas de una nueva recesión económica en España, los sindicatos y los empresarios han sido incapaces de aunar criterios sobre una reforma laboral orientada a poner freno a un paro que amenaza con superar los cinco millones de desempleados. Así lo constataron ayer Juan Rosell, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo en un documento conjunto que remitieron a la ministra de Empleo, Fátima Báñez, horas antes de que concluyera el plazo impuesto por el Gobierno para la negociación.

Después de semanas de concertación social, las organizaciones sindicales demandaron ayer al Ejecutivo «más tiempo» para intentar superar la brecha que los separa de la patronal. Mientras, los empresarios se encuentran a la espera de que el Gobierno se pronuncie. Empleo despejará hoy la incógnita de si concede una nueva prórroga en la negociación o si, por el contrario, legislará en solitario para tener un nuevo marco laboral en el primer trimestre.

La revalorización de los salarios en 2012 y 2013, la flexibilidad interna en la negociación colectiva y el abaratamiento de los costes del despido fueron los puntos básicos que impideron el acuerdo. Los empresarios defienden la congelación salarial para 2012 y 2013. Mientras, los sindicatos abogan por subidas inferiores al 1% del IPC previsto para este año. Además, la patronal quiere aplicar un contrato anticrisis en 2012 y 2013, con un despido improcedente y procedente de 20 y 12 días por año trabajado, que rechazan las centrales.

El documento conjunto que los agentes sociales remitieron a Báñez consta de tres apartados. En el primero figuran los acuerdos alcanzados en la negociación. En este capítulo, abogan por mantener las jubilaciones anticipadas y las prejubilaciones, en contra de la voluntad expresada por Mariano Rajoy en su discurso de investidura. Los agentes sociales consideran que este instrumento facilita el mantenimiento del empleo y el rejuvenecimiento de la plantilla. En otro de los acuerdos piden al Gobierno renovar las bonificaciones y la reposición de prestaciones en los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) por suspensión.

En el segundo apartado, recogen las cuestiones que consideran competencia exclusiva de sindicatos y empresarios. De ahí que demanden al Ejecutivo que no legisle en solitario en salarios y en negociación colectiva. El tercer y último capítulo alude a las discrepancias.

Puntos de acuerdo
- Racionalización de festivosLos agentes sociales se muestran partidarios de pasar al lunes los festivos en mitad de semana para evitar largos puentes.
- Jubilaciones anticipadas y prejubilacionesPiden al Ejecutivo que mantenga estos instrumentos por considerar que rejuvenecen las plantillas y sostiene el empleo.
- Bonificaciones y reposición de EREDemandan al Gobierno la renovación del acuerdo de 2009.
- Solución autónoma de conflictosAcuerdan solucionar los conflictos entre empresarios y trabajadores sin acudir a los tribunales, fomentar la formación y acabar con el absentismo laboral.

Puntos de desacuerdo
- Salarios y negociación colectivaConsideran de su competencia exclusiva la renegociación del acuerdo de salarios vigente para 2012, la orientación de los mismos hasta 2014, la potenciación de la flexibilidad interna y la estructura de la negociación colectiva. Los empresarios demandan congelar las nóminas dos años y los sindicatos, que suban por debajo del 1% de IPC.
- Contrato anticrisisLos empresarios defienden un contrato para 2012 y 2013 con un despido improcedente de 20 días, en lugar de los 45 o 33 actuales, y procedente de 12, frente a los 20 días de ahora. Los sindicatos se oponen al mismo.
- Fondo de capitalizaciónNo logran aunar criterios sobre cómo sería.