Una PAC más verde

El comisario de Agricultura piensa proponer que la PAC que se aplique a partir de 2014 sea «más verde». Eso quiere decir que Dacian Ciolos tiene intención de plantear a los Veintisiete que el importe de las ayudas directas dependa, en parte, de los compromisos ecológicos que asuman los agricultores y ganaderos en sus respectivas explotaciones. En la intervención del comisario durante la última reunión informal de los ministros, habló de «incentivos reforzados para una producción sostenible». Asimismo, apuntó otra idea: aunque el primer pilar de la PAC debe contribuir al apoyo a las rentas, también debe tender hacia una mejor gestión natural y ecológica de la agricultura, incluida la gestión de los territorios. Traducción más o menos libre de lo anterior: los agricultores y ganaderos deberán hacer frente a un aumento de las exigencias en materia medioambiental para percibir las ayudas directas de la PAC del futuro (a partir de 2014). Argumentan en Bruselas que así se justificaría mejor el pago de las mismas ante la opinión pública comunitaria. Seguro que las cabezas pensantes de la Dirección de Agricultura y de la Comisión tienen razón, porque todo lo que sea ir a favor de proteger el medio ambiente es bueno, necesario y urgente. Pero habrá que explicar que eso también supone un mayor coste económico. ¿De dónde saldrá el dinero? Además, habrá que decir que en esas condiciones los agricultores y ganaderos comunitarios no podrán competir con los productos que llegan de terceros países, que no tienen esas exigencias. ¿Cómo se explica eso?