Arranca el periodo de renovación de la fe con 30000 participantes

Valencia- El arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, dará oficialmente el pistoletazo de salida del Itinerario Diocesano de Renovación (IDR) la próxima semana, aunque no ha dejado de trabajar en su promoción. El proyecto es iniciativa suya y surgió con el objetivo de renovar los clásicos planes parroquiales que pretendían establecer los plazos, objetivos y acciones de la Iglesia.

En palabras de uno de los sacerdotes de la Comisión de Organización de las jornadas, Javier Llopis, la cristiandad no funciona como una empresa. Por ello, el arzobispo quiso llevar a la práctica el «renovarse o morir» y acercarse más a la ciudadanía. Desde la organización ya auguran su éxito y esperan más de 30.000 participantes, puesto que la primera edición «desbordó todas las expectativas».

Las peculiaridades de este año, más orientado hacia los jóvenes y nuevas actividades, entre las que destacan una peregrinación inicial organizada por arciprestazgos a un santuario. Así, Llopis destacó la variedad de los asistentes y la gran movilización de los jóvenes cristianos, por los que han editado los materiales del curso. De esta manera, el arzobispado de Valencia hizo un gran esfuerzo para reescribir y publicar los cuatro libros del Itinerario.

Sin embargo, Llopis señaló que es una orden directa del arzobispo no suprimir acciones cristianas necesarias por la actual coyuntura económica.

El arzobispo, protagonista
Asimismo, Osoro participará en muchas de las actividades del curso cristiano de renovación por voluntad propia, puesto que se trata de una «intuición» personal. Por ello, acudirá parroquia por parroquia para responder las dudas de fe de los participantes. Y es que Osoro ha situado el debate de las ideas cristianas en el centro de las jornadas.