Buenos Aires
Dos amas de casa serán las «sheriff» de dos pueblos cercanos a Ciudad Juárez
«Con las bragas bien puestas», titulaba la noticia un digital de Ciudad Juárez. Y es que a falta de «nachos» (cojones), las mujeres han tomado las riendas de la Policía de México. Dos amas de casa dirigirán las comisarías de dos peligrosos poblados aledaños a Ciudad Juárez, semanas después de que una joven de 20 años se hiciese cargo de la jefatura de Policía de otro municipio del norteño estado de Chihuahua, castigado por la violencia.
Verónica Ríos Ontiveros ha sido elegida comisaria en El Vergel, mientras que Olga Herrera Castillo se encargará de la seguridad en el poblado Villa Luz. A sus 43 años de edad, Herrera Castillo se encontraba en casa disfrutando de una telenovela cuando, en un intermedio, escuchó en un informativo local que nadie se atrevía a hacerse cargo de la jefatura.
Colgó la fregona y se puso la chapa de sheriff para tranquilizar a su pueblo, una comunidad de menos de 300 personas. Asegura no tener miedo, al contrario, está dispuesta a trabajar para brindarle a sus cinco hijos y a sus vecinos la seguridad que dice todos merecen. «Me siento orgullosa y no tengo miedo de hacer un trabajo que tradicionalmente está destinado al hombre», afirma sonriente. Herrera Castillo y Ríos Ontiveros resultaron electas el pasado domingo en las votaciones a las que sólo concurrían ellas.
Al norte del estado de Chihuahua, mientras la violencia se impone en las comunidades fronterizas, surge con fuerza la participación de la mujer al frente de la seguridad pública y privada.
A excepción de Juárez, en los pueblitos que destacan por la presencia de bandas ligadas al crimen, cada vez se observan más empresas de vigilancia privada que delegan la responsabilidad en estas amas de casa.
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