Alberto Ruiz-Gallardón

Qué falló en el túnel más seguro del mundo

La Policía revisa las grabaciones de las cámaras de los túneles de la M-30 donde fallecieron dos jefes de mantenimiento. Conocían en profundidad el sistema de seguridad y el material de las baterías que ardieron, sin embargo murieron intoxicadosConsulte el gráfico adjunto para más información

¿Qué falló en el túnel más seguro del mundo?
¿Qué falló en el túnel más seguro del mundo?larazon

MADRID- Con la tragedia del túnel del Mont Blanc, que en 1999 se cobró la vida de 39 personas debido al incendio de un camión, el proyecto del soterramiento de la M-30 a la altura del Manzanares nació con un objetivo muy claro: la seguridad ante todo. Así, cuando en 2007 se inauguró el by-pass sur, el entonces alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, pudo presumir de que era el túnel más seguro del mundo.

En estos cinco años, su historial está más que limpio en cuanto a accidentes, puesto que, hasta el pasado viernes, no se había producido ninguno de gravedad. A la espera de que la investigación resuelva las incógnitas del dramático incendio que costó el pasado viernes por la tarde la vida a un ingeniero responsable del área de mantenimiento de la empresa EMESA, encargada de la Calle 30, y el encargado general de esta misma área. Unas dudas que se acrecientan si se tiene en cuenta que, en 2009, se realizó un simulacro de Emergencias con condiciones mucho peores en el interior del subterráneo.

La búsqueda de los cuerpos
El primer interrogante que surge es qué hacían allí los técnicos de mantenimiento. Si bien son quienes mejor conocen el túnel y los responsables de acudir ante una incidencia, en caso de incendio deberían haber esperado a los Bomberos. Es más, Calle 30 cuenta con su propio retén de extinción de incendios que participó junto a los efectivos del Ayuntamiento de Madrid en los trabajos para sofocar las llamas que salían de la bancada de baterías averiada. Se desconoce si los dos empleados fallecidos formaban parte de dicho retén puesto que no llevaban un equipo de protección especial, sino el uniforme de la empresa de mantenimiento.
El aviso a Emergencias se produjo a las 17:30 horas y, según ha podido saber LA RAZÓN, los Bomberos tardaron casi dos horas en apagar completamente el fuego. Para entonces, según las fuentes consultadas por este periódico, ya se temían que hallarían los cuerpos de los trabajadores de EMESA, puesto que se había advertido de que dos personas habían acudido por la avería eléctrica y no se había vuelto a saber de ellos. Los sanitarios de Samur Protección-Civil sólo pudieron confirmar su fallecimiento que, según se confirmó ayer, fue debido a la intoxicación por humo, aunque aún se debe confirmar si fue por inhalación del dióxido de carbono del incendio o de otros gases tóxicos. De hecho, los Bomberos tardaron varias horas más en inspeccionar toda la zona debido a la gran cantidad de humo que inundaba las galerías subterráneas del túnel.

Otra de las incógnitas se refiere precisamente a la ubicación de los empleados. No ha trascendido aún si se encontraban junto a las baterías que ardieron o en alguna zona anexa, por lo que se desconoce si acudieron a observar la avería y se vieron atrapados por la nube de humo o bien intentaron sofocar el fuego por su cuenta y se vieron desbordados antes de la llegada de los Bomberos.

Alta tecnología
El by-pass sur de la M-30 cuenta con 92 cámaras de televisión, 8.500 metros de cable de detección lineal de incendios, 374 altavoces, 268 bocas de incendio equipadas, 335 metros cuadrados de protección contra incendios mediante agua nebulizada, 12.500 metros de cable de radiocomunicaciones, 21 paneles de mensajes y 19 salidas de emergencia. Es decir, tiene la más alta tecnología destinada a la seguridad de sus usuarios.

En el simulacro que se realizó en 2009, a 70 metros de profundidad y con 170 personas –entre efectivos de Emergencias y «víctimas»– implicadas, todo funcionó correctamente. El by-pass no sólo cuenta con un carril exclusivo para los vehículos de Emergencias, que discurre bajo la calzada ordinaria, sino que también cuenta con una galería que conecta los túneles de ambos sentidos para evacuar a los peatones y bajo la cual tuvo lugar ayer el incendio de la bancada de baterías. Entonces hubo que cerrarla para evitar el paso del humo de un túnel al otro, aprovechando las salidas de emergencia del exterior y la Policía calculó que en tres horas se podría reabrir el tráfico. En cambio, el túnel se mantuvo cerrado hasta ayer.