Energía

El plan eólico entre el beneficio ambiental y el económico

El plan eólico entre el beneficio ambiental y el económico
El plan eólico entre el beneficio ambiental y el económicolarazon

Valencia- La producción de energía eólica es beneficiosa para el medio ambiente. Pertenece a la familia de las renovables. Por ello, es menos contaminante que las que utilizan materias primas finitas. Eso está muy bien, pero hoy en día, ningún anuncio es completo si no viene acompañado de su correspondiente beneficio económico. El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, inauguró ayer la zona siete del plan eólico de la Comunitat Valenciana, compuesta por tres parques que producirán anualmente 250.000 megavatios hora con capacidad para abastecer a una población de 250.000 habitantes.

Explicó que la instalación de este tipo de energías son un elemento dinamizador porque permiten crear un tejido industrial complementario que conllevan importantes inversiones y puestos de trabajo. En el caso concreto de este área, se traduce en 44 millones de euros y la creación de 130 puestos de trabajo.

Fabra apuntó la importancia de que la Comunitat Valenciana cuente con un modelo energético que permita alcanzar la autosuficiencia energética que deje de tener «dependencia absoluta» de las energías tradicionales.

El plan eólico abastece las necesidades eléctricas de 2,7 millones de ciudadanos valencianos y llegará al 80 por ciento cuando esté finalizado. La potencia instalada alcanzará los 2.300 megavatios.

Respecto a los beneficios medioambientales, destacó que evitará el consumo equivalente a diez millones de barriles de petróleo y se eliminarán cada año la emisión a la atmósfera de 2,1 millones de toneladas de dióxido de carbono y se logrará un efecto depurador similar al propiciado por 140 millones de árboles.

La reducción de la factura energética también permite un ahorro en las arcas públicas. Fabra insistió en que se ha realizado un gran esfuerzo para rebajar el consumo de un 18 por ciento en los últimos cuatro años, que ha permitido una reducción de la factura energética de 2010 en 1.817 millones de euros.