Los Ángeles

Sony toma el mando

El sistema Move para PS3 llega al mercado con tres nuevos juegos de marcado espíritu familiar 

Sony toma el mando
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Muchas han sido las voces críticas contra el nuevo sistema de detección de movimiento de Sony, desde que se desde que este se presentó en el A3 de Los Ángeles el pasado año. Desde un primer momento, las comparaciones con el sistema que utiliza la Wii han sido tan continuas como inevitables. Pero ahora que ya se encuentra a la venta, la teoría y las especulaciones quedan apartadas en favor de la cruel realidad ¿El Move supera en precisión al Wiimote de Nintendo? Sin dudarlo. Jugar a ping pong nunca había sido tan realista. El jugador virtual responde con escalofriante precisión a los movimientos que realizamos con el PlayStation Move Motion Controller en la mano. Lo mismo ocurre con el «frisbee», con el tiro con arco, cuando cazamos insectos o cortamos el pelo a los sufridos clientes. Todo eso está muy bien. Pero lo que nadie parece preguntarse es para qué comprar una PlayStation 3 para tener el mismo tipo de juegos que Wii. Con unos gráficos más detallados y en alta definición, pero con idéntica jugabilidad.

El lanzamiento de Move viene acompañado por tres títulos de características y público objetivo similar. El más divertido, a la vez que más accesible, es «Start the party!». El juego es una puesta al día de los vistos en la serie «Eye Toy» de PlayStation 2. Minijuegos familiares, con la vista puesta en el público infantil, en donde tendremos ante nuestro flamante mando retos tan «estimulantes» como cazar fantasmas, pintar cuadros, conducir pájaros a sus nidos o salvar paracaidistas de las fauces de hambrientos tiburones. El segundo título es «Sports Champions». Si el nuevo mando de Move es el equivalente del Wiimote, el título que nos ocupa es el equivalente del «Wii Play». Tenis de mesa, tiro con arco, volley playa o petanca son unas de las pocas opciones que tenemos para practicar deportes con el nuevo mando. Claramente insuficientes, y un reto poco interesante para los jugadores más experimentados.

Un Ferrari desaprovechado

El tercer título es «Kung Fu Rider», un juego de género inclasificable pero que entraría dentro de un subgénero –no oficial– que podríamos llamar «japonesadas». Nos ponemos en la piel de un cobarde detective privado y de su inconsciente secretaria mientras huimos subidos en una silla de oficina. Con ella nos desplazaremos por todas las pendientes habidas y por haber mientras esquivamos a todos los mafiosos. ¿Move es un mal sistema? En absoluto. Es el más preciso de cuantos están a la venta. ¿Sus juegos presentan deficiencias? No. Pese a no ser originales, son divertidos y recomendados para toda la familia ¿Cuál es el problema? Pues que jugar a títulos tan casuales con una máquina como la PlayStation 3 es como tener un Ferrari para sacar a pasear el perro. Se puede hacer. Es muy cómodo. Pero es un gasto innecesario y un uso de recursos desproporcionado.