Cocainómanos pese a la crisis

MADRID- Lo que no había conseguido ninguna campaña de concienciación lo ha logrado la crisis: el consumo de cocaína en Europa ha dejado de crecer. Muchos consumidores, sobre todo los esporádicos, no se lo pueden permitir, pues el precio «al por menor» de esta droga oscila entre los 50 y los 80 euros por gramo en la mayoría de los países. Pero este «no hay mal que por bien no venga» no se puede aplicar a España. A pesar de que el nuestro es uno de los países más afectados por el paro y las dificultades financieras, sigue a la cabeza de la Unión Europea –y por tanto, de todo el mundo– en consumo de este estupefaciente. Así lo demuestra el informe anual divulgado ayer por el Observatorio Europeo de las Drogas y Toxicomanía (OEDT).

El triple que la media europea
Casi uno de cada siete españoles (13,6 por ciento) asegura haber probado la cocaína en alguna ocasión. El porcentaje triplica la media europea (4,3 por ciento) y es el más alto del continente. Si se habla de consumo en el último año, sólo Reino Unido adelanta a España, con 4,8 por ciento, frente a un 4,4. En cuanto a los consumidores habituales, un 2 por ciento de los españoles reconoce haber tomado esta sustancia en el último mes, una cifra sólo alcanzada por los británicos (2,1).

El informe detalla que la prevalencia entre escolares es la más alta, pues el 8 por ciento de los alumnos de 17 y 18 años la han probado. También lo es el número de personas tratadas por adicción a estupefacientes cuya sustancia principal de consumo es la cocaína (el 46 por ciento, cuando la media europea es del 10).

El informe aborda además el consumo de crack, la pasta base de cocaína. Hasta hace unos años, el consumo de esta forma de la coca, de menor precio y también de menor calidad, era casi nulo en nuestro país, y los adictos se limitaban al clorhidrato de cocaína. Sin embargo, los expertos creen que la ingesta de esta «cocaína de los pobres» ha experimentado un «llamativo incremento».