El comercio y los autónomos rechazan la huelga y no la cumplirán

Los comerciantes aseguran que abrirán sus negocios «salvo que se produzcan incidentes que obliguen a cerrar la empresa». Según la misma consulta, un alto porcentaje de los comerciantes, especialmente de aquellas poblaciones más pequeñas, considera que la jornada «transcurrirá con normalidad».

La presidenta de la Confederación, Encarna Sanchis, recordó ayer que el derecho a la huelga «es legítimo, como también lo es el derecho a no secundarla», por lo que pidió que mañana no se olvide esta premisa básica.

Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, también manifestó su respeto a la huelga, aunque señaló que esta organización no la secundará por considerarla «inútil, inoportuna» y que «no conduce a nada».
Amor se preguntó «para qué tanto coste para los trabajadores y para la sociedad, si nada va a cambiar y todo seguirá igual».

Otro sector que tampoco secundará la huelga y se opone a ella es el del metal. La Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval) expresó su rechazo al paro y aseguró que sus consecuencias agravarán la «ya deteriorada» actividad del sector metalmecánico valenciano.

Por otro lado, los sindicatos convocantes de la huelga general manifestaron ayer que la participación de los sectores industriales en el paro va a ser «un éxito» y aseguraron que no habrá daños a los bienes ni problemas de orden interno en las empresas.

Los secretarios de Organización de UGT-PV, Carlos Vila, y de CCOO-PV, Alfonso Arnedo, y el secretario de Acción Sindical de Intersindical, Adel Francés, afirmaron que el desarrollo de la jornada de huelga durante el día de mañana será «pacífico, tranquilo y sin altercados».


La huelga cuesta 700 millones
La huelga que se celebrará mañana, tendrá un coste de 700 millones de euros. Así lo aseguró ayer el decano del Colegio de Economistas de Valencia, Leopoldo Pons. Explicó que los efectos de la huelga en términos de productividad no se producen solamente a raíz del paro de mañana, sino que los agentes sociales y sindicatos empiezan a actuar en las empresas semanas antes. Pons, quien aseguró que la cifra del coste es aproximada, explicó que el dato variará en función tanto del sector empresarial como del ámbito territorial de ubicación.