Amnistía tributaria para los innovadores

MADRID- Siguiendo la senda de medidas liberales que se han debatido este fin de semana en el XV Congreso del PP de Madrid, la alcaldesa de la capital, Ana Botella, aprovechó ayer su intervención en la clausura del cónclave popular para realizar dos anuncios económicos: quiere la regidora madrileña fomentar la creación de empleo, por eso, eximirá del pago de impuestos a los empresarios que se embarquen en proyectos de investigación, desarrollo e innovación, también llamados proyectos de I+D+i, y revisará toda la normativa municipal para reducir al máximo la burocracia a la que se deben enfrentar los empresarios antes de iniciar su actividad en Madrid.
Fuentes muncipales informaron de que la intención de Botella es aprobar la primera de las medidas en el último pleno de julio o en los primeros de septiembre, para que su puesta en marcha no se dilate. Asimismo, explicaron que la iniciativa se basará en el concepto de las Zonas Francas –en las que se prima la instalación de empresas que trabajen en proyectos de un determinado sector económico–, pero abarcará todo el territorio de la capital.
Un ejemplo de este sistema se implantará próximamente en el barrio de Las Letras, donde los empresarios que se dediquen a iniciativas culturales o creativas tendrán ventajas fiscales en las tasas de vados y basuras, a la hora de pagar los impuestos de sus vehículos o para acometer instalaciones u obras en sus locales.
El Ayuntamiento, según las mismas fuentes, planea ofrecer el suelo disponible en los polígonos industriales del sur, que han sido renovados recientemente, a empresas relacionadas con la «aplicación de conocimientos y valor añadido» para que «tengan el mismo trato que las que se instalan en las Zonas Francas». La propuesta, que se concretará con el proyecto de ley de emprendedores en el que trabaja el Gobierno de Rajoy y la ley de dinamización del Ejecutivo de Aguirre, dotará a los negocios de investigación y desarrollo del mismo tratamiento que el que reciben los proyectos culturales en Las Letras. Se trata, añadieron desde Cibeles, de «crear un ecosistema ideal para que la "nueva economía"se instale en Madrid».
En lo que respecta al segundo de los anuncios de Botella –la revisión de toda la normativa municipal que «suponga un impedimento» para la actividad empresarial–, la alcaldesa calificó de «inadmisible» que la creación de una empresa sea «una carrera de obstáculos» con una sucesión de normas que generan incertidumbre. El Ayuntamiento quiere suprimir, por ejemplo, la normativa de comercio minorista de alimentación y la de aves, huevos y caza.