Habrá marejadilla por Julián García Candau

Los recortes también han llegado al fútbol. Desde el CSD se anuncia que se reducirán los beneficios que los clubes perciben de las quinielas. Durante cuarenta años, el franquismo no dedicó especial atención al deporte en los Presupuestos Generales del Estado. Todos los dineros se captaron de las quinielas, es decir, de lo que producía el fútbol. De este deporte, la auténtica teta de la vaca, vivían todos los demás. Sin los ingresos de las quinielas, no habría habido presupuesto para atletismo, baloncesto o ciclismo, pongamos por caso. Después, los clubes consiguieron que, a pequeñas dosis, les fueran aumentando su participación. Habían llegado al diez por ciento. Ahora, en plena crisis, se les va a rebajar el beneficio. Con las quinielas se ha ido pagando al Estado la deuda de Hacienda. Los clubes, en otros tiempos, con Manuel Vega Arango como presidente de la LFP, se boicotearon las quinielas diversificando los horarios y jornadas de los partidos para evitar la correcta apuesta. No hace mucho, volvieron a pedir mayor porcentaje y ahora se topan con que se lo van a reducir.

El fútbol ha aminorado buena parte de los presupuestos y no puede hacer otra cosa dado que, entre otras cuestiones, está bajando la asistencia a los estadios. Hasta en Segunda, aún tienen precios anteriores a la crisis. La decisión del CSD será torpedo en línea de flotación. Habrá marejadilla.
Posdata. Esta vez no habrá huelga. Los clubes están cogidos por las deudas con Hacienda y Seguridad Social.