El fiscal pide 10 años de prisión para Otegi como «dirigente terrorista»

El fiscal de la Audiencia Nacional Vicente González Mota ha mantenido su petición de diez años de cárcel para el ex portavoz de Batasuna Arnaldo Otegi y el ex secretario general de LAB Rafael Díez Usabiaga, al considerarles "dirigentes"de ETA por el "papel relevante"que asumieron en Bateragune y porque "no han renunciado a los fines y métodos"de la organización terrorista.

"Las defensas en ningún momento han podido rebatir las tesis acusatorias para decir que los acusados han actuado al margen de ETA ni que condenen su actuación", ha señalado el fiscal antes de apuntar que Bateragune respondía a la necesidad de crear "un entramado político-institucional que complementase las acciones terroristas". "Nadie ha pedido que desaparezca la amenaza de las bombas ni el cese de la violencia", ha dicho González Mota.

El fiscal, que ha presentado su informe de conclusiones en la octava sesión del juicio, ha explicado ante el tribunal que existen "pruebas irrefutables"de que la banda terrorista "dejó en manos"de Otegi y su grupo "campo libre"para constituir "un órgano de dirección o de organización"de la izquierda abertzale que "ni se desvincula de ETA ni prueba que la banda armada haya querido modificar su estrategia político-militar". "La estrategia se desarrolla en el seno de ETA, no sin ETA", ha recalcado.

El fiscal, además, ha mantenido el delito de integración en organización terrorista que imputaba tanto a Miren Zabaleta, a la que ha rebajado la petición de pena de 10 a 9 años de cárcel, como a Arkaitz Rodríguez y Sonia Jacinto, para los que finalmente ha pedido
8 años de prisión.

Para los otros tres acusados, José Luis Moreno, Amaia Esnal y José Manuel Serra, el fiscal ha retirado la acusación al considerar que a lo largo de la vista oral no se ha podido demostrar que formaran parte de Bateragune.

Durante la exposición de su informe, el fiscal ha recordado que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), el Constitucional y el Supremo han considerado "indubitadamente acreditado"que ETA y Batasuna, cuya función pretendía asumir Bateragune, forman parte de una misma "realidad orgánica", de forma que "una está instrumentalizada por la otra para la ejecución de los mismos fines".

"Son contrarias a derecho e ilegales por tratar de perpetuarse como una estructura de soporte a la organización terrorista", ha recordado el representante del Ministerio Público antes de añadir que el juicio contra estas organizaciones no supone "una valoración de opciones políticas"sino que responde al "cumplimiento de la ley".

A su juicio, Bateragune fue concebido bajo "la pretensión de que el Estado cambie el marco constitucional presionado por el ejercicio de la violencia", por lo que, a su entender, "es lo que más se aproxima a un concepto internacional de terrorismo".