Hungría

La empresa propietaria de la represa no se responsabiliza del vertido

La empresa de aluminio húngara MAL, propietaria de la represa de una sustancia tóxica que sufrió el pasado lunes una rotura, causando una catástrofe medioambiental en el oeste de Hungría, asegura que no pudo prever el accidente, ni hacer nada para evitarlo.

En un comunicado colgado hoy en la página web de la empresa, la compañía de aluminio asegura que "hasta el momento no se han podido precisar cuáles fueron las causas de la catástrofe".

La compañía señala que el "barro rojo", un residuo de la producción de aluminio, "no es calificado como residuo peligroso según los estándares de la Unión Europea (UE)".

Además, destaca que según las imágenes aéreas, el 98 por ciento del "barro rojo"sigue dentro de la balsa.

La dirección de la empresa reiteró que lo que sucedido no fue un error suyo y ofrece 30 millones de florines (unos 110.000 euros) como ayuda urgente a los habitantes de las localidades afectadas, por el vertido del barro tóxico.

MAL asegura además que ha iniciado las obras para reconstruir el dique y realizará otras para evitar nuevas roturas.

Por otra parte, propone la formación de un comité internacional para aclarar los detalles del accidente.

 

Hungría pide ayuda

 

Hungría ha activado el mecanismo europeo de protección civil y ha pedido ayuda técnica para hacer frente a la contaminación causada por el vertido de lodos tóxicos procedentes de una fabrica de aluminio, que ya han llegado al Danubio.

Hungría recurrió a la UE para solicitar "asistencia internacional urgente"anoche, según informó el Ejecutivo comunitario en un comunicado difundido a última hora de la tarde.

Las autoridades húngaras han identificado una necesidad inmediata de 3 o 5 expertos con experiencia sobre el terreno en la gestión de vertidos tóxicos, limpieza y reducción del impacto medio ambiental.

El Centro de Control e Información (conocido como MIC) ha estado en contacto estrecho con las autoridades húngaras desde el lunes para seguir la evolución de la situación y estar lista para reaccionar con rapidez en caso de que Budapest solicitase ayuda.

Tras la petición oficial de ayuda, el MIC se ha puesto en contacto con los 31 países que participan en este mecanismos y espera recibir ofertas de ayuda en breve, según un comunicado de la CE.

"Desastres como este no se detienen en las fronteras nacionales", afirmó la comisaria europea de Ayuda Humanitaria y Respuesta a las Crisis, Kristalina Georgieva, después de recibir la petición de Hungría.

"Una ayuda europea combinada puede ayudar a dar la asistencia más efectiva posible", agregó y solicitó a los estados miembros de la UE que respondan con "generosidad".

La petición de ayuda se produjo anoche después de que la comisaria europea de Ayuda Humanitaria y Respuesta a las Crisis, Kristalina Georgieva, mantuviese una conversación telefónica con el ministro del Interior húngaro, Sándor Pintér, para trasmitirle el apoyo de la UE y para interesarse por la situación en el país.