Los sindicatos aseguran que no conciben un escenario de fracaso

MADRID- Sepultada por el debate secesionista de Cataluña o el de los desahucios, la huelga general de hoy ha pasado más desapercibida de lo que a sus promotores les hubiera gustado en los últimos días. Pero a pesar de que las centrales no han podido caldear el ambiente como les hubiese gustado y del creciente descontento de la clase trabajadora con las centrales, sus secretarios generales se mostraron ayer convencidos de que el paro será un éxito. Tanto Ignacio Fernández Toxo (CC OO) como Cándido Méndez (UGT) afirmaron que «no conciben un escenario de fracaso», que están convencidos de que tendrá una amplia participación.

Fracaso del Ejecutivo
Es más, los líderes sindicales creen que será el Gobierno el que fracase si no atiende el «clamor social» que se expresará en toda España, donde hay convocadas más de 100 manifestaciones para acompañar la jornada de huelga. «El ejercicio de un derecho constitucional como es el derecho de huelga nunca puede ser un fracaso. No concebimos un escenario de fracaso. (...) El fracaso sería del Gobierno si no fuera capaz de atender el clamor social que se va a expresar en el día de mañana», dijo Méndez en declaraciones a la cadena SER. El dirigente de UGT estima que el Gobierno debería aprovechar de manera «inteligente» ese clamor para decir a las autoridades europeas que España, que tiene un peso sobre la economía europea del 12%, no puede seguir acometiendo políticas de recortes. Para Méndez, aunque todas las huelgas generales convocadas han tenido sus motivos, la de mañana «es la que más motivos tiene con diferencia». Eso es, en su opinión, lo que debe analizarse y no el tiempo pasado entre un paro general y el siguiente. El dirigente de UGT dijo que los sindicatos son organizaciones clásicas, pero «no ancladas en el pasado», y que el derecho de huelga es un ejercicio antiguo, «pero no anticuado».

Por su parte, el líder de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, aseguró ante los micrófonos de la SER que «cada vez» tiene menos dudas de que la huelga va a tener una participación mayoritaria. «Lo que era una indignación sostenida y contenida de la gente se ha convertido en la conciencia de que merece la pena ir a la huelga contra la sinrazón de unas políticas que están empobreciendo a los trabajadores», dijo Toxo. El líder de Comisiones defendió que las movilizaciones pueden cambiar las cosas.