OPINIÓN: Recortes

No es la primera vez que aquí me ocupo de los recortes en Educación, en otras regiones comenzaron antes. Ahora les llega el turno a los valencianos y no me extraña que los jóvenes se echen a la calle a defender la necesidad de un sistema educativo eficiente y equiparable al de cualquier gran país europeo. Son muchos los centros en donde se exige al profesor que traiga de su casa el papel higiénico que ha de usar, sí, sí, como lo oyen. Y no se imagina nadie lo incómodo que es dar clase toda la mañana con el abrigo, la bufanda y los guantes puestos, porque aunque en el instituto ha comenzado el día con -2ºC, no hay dinero para pagar la calefacción. Los alumnos encofrados en sus chaquetas, enojados, helados y desconcentrados. Y lo peor no es la disposición material de los centros, sino la cantidad de profesores que dejará de impartir clase el año que viene. Interinos, vacantes, fuera. A los profesores que quedan se les exige dar clase más horas, y aún así se perderán muchas clases de refuerzo para una gran mayoría de alumnos de bajísimo nivel, que es lo que tenemos en España ahora. (Las tardes con «la Play», con la televisión y el ordenador no dejan mucho tiempo para gozar de los necesarios estímulos intelectuales y culturales que requiere una formación adecuada). Cuando en un país se resta dinero a la educación se está agrediendo perniciosamente el futuro de esa misma nación. Éstos que corren por las calles huyendo de los embates de la policía, estos jóvenes, serán los futuros empresarios, profesionales, políticos y dirigentes. Con la formación de hoy se gobernará mañana. Estas dos últimas décadas hemos dejado que el sistema educativo se degrade, ahora directamente estamos acabando con él.