La agenda exterior se queda en Europa

Madrid- La agenda internacional del futuro presidente del Gobierno tendrá sabor europeo. El Gobierno interino de Zapatero aún debe cumplir con dos compromisos fuera de España, el Consejo Europeo del próximo nueve de diciembre en Bruselas y la reunión de la Alianza de Civilizaciones en Qatar los días 11 y 12. Sin embargo, fuentes diplomáticas aseguraron a LA RAZÓN que la presencia del todavía presidente en el foro qatarí está lejos de haber sido confirmada «dadas las circunstancias».

Donde seguro acudirá el aún jefe del Ejecutivo será a Bruselas, donde se tomarán medidas determinantes para la salud de la zona euro. Mariano Rajoy acudirá dos días antes, el 7 y 8, a Marsella para participar en la reunión del Partido Popular Europeo (PPE), donde podrá reunirse con al menos 16 de sus futuros homólogos. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, también estarán en Marsella, igual que el presidente del Consejo, Herman Van Rompuy, y de la Comisión, Durao Barroso, todos ellos del mismo color político. Sin duda, un momento idóneo para coordinar posturas con el ganador del 20-N.

No será hasta principios de marzo cuando el líder del PP acuda a su primer Consejo en calidad de presidente del Gobierno. Los días 1 y 2, también en Bruselas, se celebra el primero de los dos consejos previstos para el próximo semestre (el segundo será a finales de junio), aunque a buen seguro habrá alguna cita extraordinaria debido a la debacle financiera que asola a la moneda común.

Ya fuera de Europa, Marruecos es tradicionalmente el primer país que visitan los presidentes nada más tomar posesión. Se desconoce si Rajoy tiene intención de seguir la tradición, aunque su viaje sería muy apreciado en el país vecino. Sobre todo teniendo en cuenta que hace casi un año cientos de miles de marroquíes se echaron a la calle para protestar contra el PP por ser «enemigo» de Rabat.

La Lupa
Monti invita a Rajoy a Italia
El recién nombrado primer ministro italiano, Mario Monti, felicitó a Rajoy por su «brillante» resultado y le transmitió su deseo de reunirse «pronto» en Roma tras la toma de posesión. El Gobierno italiano espera que «a la luz de la histórica amistad» sea posible continuar con una «estrecha coordinación».