Merkel cede y anuncia un plan de crecimiento para la UE

La gran incertidumbre que se cierne sobre el Viejo Continente debido a la atonía de la economía está obligando a los líderes a cambiar el rumbo. La canciller alemana, Angela Merkel, hasta ahora paladín incansable de la austeridad, anunció ayer la redacción de una «agenda de crecimiento» para la UE que deberá estar lista de cara a la cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la UE del próximo mes de junio.
Aunque Merkel volvió a responder al candidato socialista francés, François Hollande, que no se puede renegociar el Pacto Fiscal, la responsable germana va abriendo poco a poco la mano y ahora se hace eco de la necesidad de reforzar con políticas de estímulo las reglas que contemplan la estabilidad presupuestaria como objetivo para todos los estados miembros.
En una entrevista en el rotativo «Leipziger Volkszeitung», Merkel destaca que forma parte de su responsabilidad «cooperar bien» con cualquier presidente francés y se suma a la propuesta del candidato galo de «reforzar las posibilidades del Banco Europeo de Inversiones». Con 10.000 millones de capital, podría elevar a 60.000 millones su capacidad de préstamo y reforzaría sus opciones de inversión hasta los 160.000 millones.
«Se debe desarrollar de manera paralela una política que fomente el crecimiento y el empleo, que devuelva la competitividad a los Estados, pero no un crecimiento a base de crédito», explica. «El crecimiento no debe costar necesariamente dinero», advierte Merkel, quien ahora reconoce, no obstante, que el Pacto Fiscal es insuficiente para superar esa crisis. «Nuestro objetivo consiste en superar la crisis de deuda apoyados en dos pilares. Primero, el de una sólida política fiscal, sin la cual no será posible aliviar esta crisis. Pero esa medida, por sí sola, no es suficiente. Es necesario adoptar una postura política, para conseguir que los estados miembros vuelvan a ser competitivos», declara.
Para Merkel, es hora de conjugar «reformas estructurales» y «eliminar las barreras que impiden un desarrollo saludable».
Tras la publicación de la entrevista, Hollande se arrogó el mérito del cambio de actitud de Angela Merkel. Según el candidato socialista a la presidencia de Francia, la «perspectiva» de su victoria ha llevado a la canciller alemana a modificar un tanto su opinión. Aunque sólo sea por este cambio de planes, aseguró en la emisora Radio J, «la campaña electoral ha sido ya útil».