Barcelona

Montilla cede y acepta el lema «Somos una nación nosotros decidimos»

Después de varios días haciendo «el ridículo», los organizadores de la manifestación de mañana en Cataluña y los partidos que la apoyan (CiU, PSC, ERC e ICV) llegaron ayer a un pacto para desfilar conjuntamente en protesta por la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut.

Montilla cede y acepta el lema «Somos una nación nosotros decidimos»
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La estampa de unidad se había convertido en una obsesión para todos los que abogaron por echarse a la calle tras conocer el fallo del TC, pero hasta ayer estuvo en peligro. Finalmente, la concesión del presidente de la Generalitat, José Montilla, que asumió el lema soberanista «Somos una nación, nosotros decidimos», hizo posible la unidad. A cambio, podrá situarse al frente de la protesta.

Montilla se garantizó, eso sí, que las fotografías de mañana le retraten detrás de una «senyera» porque la parte central de la pancarta llevará la cuatribarrada catalana y, a lado y lado, la consigna fragmentada: «Somos una nación», a la derecha, y «Nosotros decidimos», a la izquierda. Junto a Montilla, marcharán en primera línea el presidente del Parlament, Ernest Benach; los ex presidentes de la Generalitat, Jordi Pujol y Pasqual Maragall; y los ex presidentes del Parlament Joan Rigol y Heribert Barrera.A pocos metros le seguirán los líderes de partidos y sindicatos, que portarán una segunda pancarta con el lema «Somos una nación, nosotros decidimos» sin fragmentación alguna. Òmnium, la asociación cultural de orientación soberanista que ha liderado los trabajos de organización se ha salido de esta manera con la suya. Su lema se mantiene y únicamente ha tenido que asumir la presencia de la «senyera».La «dignidad»Montilla se mostró satisfecho por el resultado de las negociaciones con partidos y organizadores, a quienes agradeció su predisposición al acuerdo. Dicho esto, arengó a las masas: «Para luchar por la dignidad de un país se tienen que hacer muchas cosas. Cuando hay una agresión, a veces, hay que salir a la calle. También el Gobierno y el Parlament tienen que hacer su trabajo, que estén a la altura de las circunstancias».Los ex presidentes de la Generalitat y del Parlament, por su parte, apelaron en una declaración conjunta al «orgullo, la autoestima y el sentido de la dignidad» de los catalanes. «Hace falta que nos hagamos respetar», dijeron.La presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, por su parte, censuró que Montilla y Artur Mas se manifiesten «en contra del orden legal y de las reglas del juego». Además la dirigente popular aseguró que tanto CiU como el PSC «se han quitado la careta y han mostrado que la federación apuesta claramente por la independencia, y que el PSC ha abandonado sus principios». ERC y el inicio del cambioEl fallo del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut ha excitado los ánimos de los independentistas, que ahora se ven cargados de razones para decir adiós a España. Tanto es así, que el presidente de ERC, Joan Puigcercós, ve la manifestación de mañana «no como un desahogo colectivo,sino como el inicio para que Cataluña decida su futuro». Los republicanos propugnaron también la unión de los partidos catalanes en el Congreso, al estilo de la antigua Solidaritat Catalana en el siglo XX.